La ciudad de Nueva York suaviza los mandatos de mascarillas

Al afirmar que es hora de que la ciudad de Nueva York celebre "la recuperación de su ritmo", el alcalde Eric Adams anunció el viernes nuevas políticas relacionadas con el manejo de la pandemia de COVID-19.

En un discurso pronunciado en Times Square, Adams dijo que las máscaras serán opcionales en las escuelas públicas. Además, también suspendió el requisito de vacunación de la ciudad para lugares cerrados como restaurantes, teatros y gimnasios.

Ambos cambios entrarán en vigor el lunes.

Los anuncios eran de esperarse. Después de que la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, anunciara el fin de semana pasado que el estado planeaba levantar el mandato del uso de mascarillas escolares a partir del miércoles, Adams anunció que haría lo mismo, siempre que no hubiera un aumento inesperado en los casos.

Adams dijo que los estudiantes pueden continuar usando máscaras, incluyendo a los del jardín de infantes hasta el grado 12. Las máscaras seguirán siendo obligatorias para todos los entornos donde haya niños menores de 5 años. Actualmente, no hay una vacuna COVID-19 disponible para niños de esa edad.

Se habló de levantar el mandato de mascarilla para los más pequeños. Sin embargo, Adams comentó que los datos mostraban que esa edad tenía la tasa de hospitalización más alta entre los niños.

“Preferiría que la gente me criticara que perder a los bebés de nuestra ciudad”, dijo.

También elogió a la comunidad empresarial de Nueva York y señaló un cumplimiento del 94 % del mandato de vacunas. La ciudad continuará recomendando, pero no exigiendo, el uso de máscaras en grandes reuniones. Aún así, los negocios tendrán la opción de exigir máscaras o vacunas para permitir el ingreso.

Pero ahora que el coronavirus muestra evidencia de disminuir significativamente después de dos años, Adams dijo que es el momento de concentrarse en reactivar la economía de la ciudad.

“Los neoyorquinos deberían salir y disfrutar de nuestra increíble ciudad”, dijo. “Puede que la batalla no haya terminado, pero claramente estamos ganando la guerra. Estamos abiertos para recibir clientes, y la ciudad de Nueva York ha recuperado su ritmo”.

Adams también presentó un nuevo sistema codificado por colores para identificar el nivel de amenaza de COVID-19 en la ciudad. Los colores van desde el rojo, que significa "muy alto", hasta el verde, que significa "bajo".

Actualmente, la ciudad se encuentra en un nivel verde, lo que significa que hay baja difusión comunitaria. Los niveles más altos podrían conducir a un regreso a los mandatos de máscaras y vacunas.

Sin embargo, el enfoque del viernes no fue sobre lo que podría suceder, sino lo que los funcionarios y líderes empresariales quieren que suceda a medida que la ciudad emerge de la emergencia sanitaria.

“Necesitamos ser inteligentes. Necesitamos estar seguros”, dijo Andrew Rigie, director ejecutivo de New York City Hospitality Alliance. “Pero debemos unirnos y apoyar a nuestros restaurantes, apoyar nuestra vida nocturna. Porque sin ellos, la ciudad de Nueva York no se recupera”.