Economía
La basura de algunos es un tesoro para la dictadura venezolana
Un nuevo informe muestra cómo los venezolanos venden basura para sobrevivir al infierno económico impuesto por Maduro
Abril 1, 2022 1:05pm
Updated: Abril 1, 2022 6:22pm
Desde que el dictador venezolano Nicolás Maduro firmó el Decreto Estratégico de la Chatarra en marzo del año pasado, el régimen ha intentado tapar los agujeros de la fallida economía de la nación sudamericana con la venta de materiales reciclados como hierro, aluminio, fibras ópticas, tarjetas electrónicas y cartón.
"Queremos potenciar la vía productiva de Venezuela. Por eso los recursos derivados del material reciclado serán destinados a la industria nacional", explicó Maduro al anunciar su iniciativa estratégica de reciclaje.
En los últimos años, la industria petrolera estatal de Venezuela ha sido incapaz de producir altos niveles de petróleo de calidad para la exportación, debido principalmente a la falta de inversión en el sector y a los obstáculos para vender debido a las sanciones de Estados Unidos, informó Reuters.
"Venezuela se va a aligerar, porque están sacando toda la chatarra", afirmó Douglas Lugo, un camionero que transporta chatarra desde la ciudad de Guanta.
Aunque los materiales de chatarra venezolanos se han vendido en el extranjero en el pasado, empresas privadas intensificaron los esfuerzos de exportación a mediados de 2020 y tanto la calidad como la cantidad de los materiales exportados han aumentado desde entonces. El caos económico provocado por las reformas económicas y políticas iniciadas por el exdictador Hugo Chávez también afectaron a industrias como la manufacturera y la de construcción.
Para mitigar la falta de ingresos extranjeros, Maduro designó la chatarra como un recurso "estratégico" en 2021 y ordenó exportar los excedentes de materiales para "convertirlos en divisas... para aprovechar hasta el último recurso que haya".
Desde entonces, las empresas estatales y privadas tratan de vender los equipos y maquinaria obsoletos como chatarra. Aunque el régimen venezolano ha respaldado estas medidas, algunos críticos advierten que los trabajadores individuales y algunos oportunistas han empezado a robar equipos para venderlos para beneficio propio.
El aumento de las exportaciones de chatarra desde Venezuela puede verse en los registros portuarios que muestran que este producto se exporta a países como India, Turquía y Taiwán a través de la Corporación Ezequiel Zamora, una empresa estatal que tiene contratos con empresas privadas y una red capaz de eludir las sanciones de Estados Unidos, informó Reuters.
Según fuentes cercanas al asunto, las empresas extranjeras pagan a Zamora en efectivo con monedas extranjeras y luego se encargan de exportar el material a compradores extranjeros.
En total, más de 25 empresas han sido autorizadas oficialmente para transportar y vender chatarra. En 2021, se vendieron 45.500 toneladas de chatarra de hierro, acero y cobre desde dos de los principales puertos de Venezuela por 55 millones de dólares, según datos de Import Genius. Aunque los precios pueden variar, los expertos aseveran que las empresas compran la chatarra por entre 80 y 120 dólares y luego la venden por más de 700 dólares.
La empresa local de análisis Ecoanalítica publicó un informe en febrero que mostraba que las ventas de chatarra "han aumentado considerablemente durante los meses en que la pandemia de la COVID-19 era más grave, cuando los ingresos del Estado eran bajos".
Pero a medida que la crisis económica sigue afectando a la vida y sustento de millones de venezolanos, cada vez se considera que la chatarra tiene mayor valor en comparación con las máquinas en funcionamiento, por lo cual los equipos se desmontan y se venden en todo el país.
"Hoy no se restaura nada, todo está en venta", expuso una fuente bajo condición de anonimato por temor a represalias.
A medida que la industria de la chatarra sigue en auge, muchos profesionales dejan sus trabajos y comienzan en el negocio de la chatarra, donde muchos aseguran que pueden ganar hasta 10 veces el salario mínimo mensual de Venezuela.
"Todo el mundo está trabajando con la chatarra. Antes no se veía eso (...). Se puede ganar dinero para sobrevivir", dijo Antonio Astudillo, un camionero que trabaja en el transporte de chatarra a Guanta desde diciembre.