Daniel Ortega califica de "traidor" a su hermano por condecorar a militar estadounidense en 1992

El dictador nicaragüense Daniel Ortega tildó de “traidor” a su hermano Humberto -a quien la policía puso bajo “vigilancia médica” en su casa hace varios días- por haber condecorado al agregado militar estadounidense en Managua en 1992.

“Él le vendió su alma al diablo”, dijo Ortega durante un acto ante decenas de militares y policías, en la primera alusión pública a su hermano desde que estalló la polémica hace 12 días, cuando el general retirado ofreció una entrevista que aparentemente irritó al régimen.

Al referirse a Humberto Ortega como “el jefe del Ejército en ese entonces”, sin mencionarlo, Ortega calificó la condecoración del militar Dennis Quinn como un “acto de entreguismo" y "vergüenza nacional".

"Esta inconcebible acción se califica como vergüenza nacional al entregar a un militar yanqui una medalla de tanta relevancia y trascendencia y evidentemente constituye un acto de entreguismo y traición a la patria", expresó el dictador.

Ortega afirmó que su hermano ya "tenía entregada su alma al diablo" en la década de 1990 y procedió a anular la condecoración por un decreto.

Quinn fue condecorado en ese entonces con la medalla ‘Camilo Ortega’, quien fue el menor de los tres hermanos y murió en combate durante la insurrección final de los sandinistas contra el régimen militar de Anastasio Somoza, en 1978. El Ejército sandinista, dirigido por Humberto desde 1979 a 1995, creó la medalla en su honor tras la caída de Somoza un año más tarde.

Opositores en el exilio han denunciado que Humberto Ortega, crítico del régimen, se encuentra bajo detención domiciliaria, luego de que la Policía instalara una unidad médica en su casa.

Según la oposición, eso ocurrió justo días después de que el exjefe del Ejército dijera en una entrevista que Ortega carece de sucesores y que su poder no resistirá a un eventual fallecimiento.

El régimen nicaragüense ha despojado de la nacionalidad a más de 300 opositores y críticos de su gobierno, a los que envió al exilio acusándolos de "traidores" y "vendepatria".