Irán condenó a muerte a cinco manifestantes más por participar en marchas contra el régimen

El Tribunal Revolucionario de Irán en la última semana ha condenado a muerte a cinco personas por participar en las protestas que han envuelto al país en los últimos dos meses tras la muerte de la joven Mahsa Amini.

Hasta el momento solo se conocen los nombres de dos de los sentenciados: Manouchehr Mehman Navaz y Mohammad Boroughani, condenados por presuntamente quemar un edificio gubernamental en Teherán, reportó Aristegui Noticias.

Otra persona fue procesada, según el régimen de Irán, por atacar a agentes de policía con su automóvil; el segundo por apuñalar a un oficial de seguridad; por su parte, el tercero por tratar de bloquear el tráfico y sembrar el "terror", según los veredictos citados por Infobae.

Las nuevas condenas se produjeron después de que se emitió la primera sentencia de muerte en relación con el movimiento de protesta que ha sacudido al liderazgo de la república islámica.

Medios internacionales informaron el lunes que una persona fue condenada a muerte el fin de semana por incendiar una instalación gubernamental y de "enemistad contra Dios".

Al menos otras 20 personas se enfrentan actualmente a cargos que les podrían acarrear la muerte, según denunció la organización Iran Human Rights (IHR), con sede en Noruega, quien cita informes oficiales.

La semana pasada, los dirigentes iraníes prometieron actuar con dureza contra los manifestantes, a quienes han calificado de "alborotadores" y los declararon "enemigos del Estado".

Al respecto, IHR denunció que, hasta ahora las fuerzas de seguridad iraníes han asesinado al menos a 342 personas, entre ellas 43 niños, que participaron en las protestas.

La organización también advierte que al menos 15.000 personas han sido arrestadas por acudir a las manifestaciones, aunque esta cifra ha sido negada por las autoridades iraníes, apuntó Infobae.

Irán lleva ocho semanas sumergido en protestas por la muerte de Masha Amini. Quemas de hiyabs, gritos de libertad y ataques a la policía se han visto en todo el país, por parte de mujeres y hombres que exigen justicia para la joven y el final de la represión.

Amini, una mujer iraní de 22 años de origen kurdo, murió bajo custodia de la policía moral después de ser arrestada por una supuesta violación del estricto código de vestimenta para las mujeres en ese país.