Secretaria de Energía dice que aumento del precio del gas es “una transición energética”

La secretaria de Energía de Estados Unidos, Jennifer Granholm, incomodó este lunes a los críticos de las políticas de energía verde de la Administración de Joe Biden al decir que el aumento de los precios del gas son parte de una “una transición energética”.

“La realidad es que tenemos que tomarnos un tiempo para dejar el petróleo y el gas, lo reconocemos", dijo Granholm, firme defensora de las iniciativas de energía verde de Biden. Incluso participó en una canción en 2018 sobre el fin de la gasolina y los combustibles fósiles.

También se le preguntó durante una rueda de prensa en la Casa Blanca sobre cuántos barriles de petróleo consume Estados Unidos a diario, esto con respecto a la decisión de Biden de recurrir a la Reserva Estratégica de Petróleo el martes.

"No tengo esa cifra a mano", admitió.

Los críticos calificaron la medida de Biden como una “política sin sentido”, señalando que los estadounidenses usan un promedio de 18 millones de barriles al día, pero el mandatario solo había ordenado la liberación de 50 millones de barriles, menos de tres días de suministro.

Los operadores no se mostraron impresionados por la medida, y Associated Press informó que los precios de las acciones del sector aumentaron un dos por ciento el día del anuncio.

La Reserva Estratégica de Petróleo generalmente se usa en casos de emergencia como, por ejemplo, cuando el expresidente Donald Trump recurrió a ella para obtener 5 millones de barriles después de que el huracán Harvey azotara a Texas en 2017.

Granholm fue criticada a principios de este mes cuando se burló de la pregunta de un presentador de Bloomberg News sobre cómo Biden planeaba aumentar la producción de petróleo para bajar los precios.

"Eso es muy gracioso”, dijo Granholm después de reírse de la interrogante. "¡Ojalá tuviera una varita mágica!".

Granholm culpó la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) por no aumentar la producción, mientras restaba importancia a las políticas de Biden que habían dificultado la producción nacional.

Su comportamiento generó comparaciones con el de la vicepresidenta Kamala Harris, que ha sido objeto de críticas por burlarse y reírse nerviosamente de las preguntas difíciles.