Derechos Humanos
EXCLUSIVA Ulises Toirac enfrenta la censura institucional por sus críticas con humor: "Eso al poder no le gusta nada"
Ulises Toirac, crítico en redes sociales con la realidad de Cuba, recientemente perdió dos presentaciones por supuestas presiones del Ministerio de Cultura del régimen
Septiembre 21, 2023 11:13am
Updated: Septiembre 21, 2023 11:13am
Hace poco, especialistas del independiente Observatorio de Derechos Culturales en Cuba denunciaron en Twitter la “estrategia de censura” al humorista cubano Ulises Toirac, quien recientemente perdió dos presentaciones por supuestas presiones del Ministerio de Cultura del régimen.
Toirac, crítico en redes sociales con la realidad cubana, cuestionó en sus redes a la entidad e informó que tenía previstas solo dos presentaciones, pero que desde allí presionaron a los organizadores de los espectáculos para que lo quitaran del elenco.
"A ver si nos entendemos: ¿quién me puso en 'la lista' y cuáles son sus razones? ¿Sabe que negarme trabajar me niega vivir? Porfa, 'interesado' al privado. Y voy a grabar esta vez. No va a ser como la vez que me negaron grabarlo, ¿ok?", señaló en Facebook el popular humorista.
Ahora, en entrevista exclusiva con ADN América en Español, el actor nos da su versión de los hechos.
"En pocas palabras, hace un tiempo un escritor que tiene una peña en un centro de los del Ministerio de Cultura me invitó a participar. Es una peña conversacional y bueno, días después [de la invitación] me llamó y me pidió disculpas porque directamente le dijeron que yo no podía estar en la peña porque estaba muy activo en redes y en las directas que hago lunes, miércoles y viernes en la mañana desde mis redes sociales, yo expresaba opiniones contrarias al proceso revolucionario. En fin, un largo etcétera".
Toirac asegura que en otra ocasión reciente también enfrentó el mismo problema. "[Otro] productor que organiza espectáculos me pidió ser la figura central de un espectáculo en el Teatro Nacional y luego me llamó diciendo que le habían pedido que cambiara el elenco. Sé que ésta es una práctica usual y ya me he visto en ocasiones anteriores metido un saco en el que de pronto estás sin trabajo porque nadie te lo ofrece, o te dan una disculpa o no te hablan. Es decir, que es muy poco probable que te hablen de frente cuando te niegan un espacio".
El popular humorista asegura que no está interesado en ser identificado como un "censurado", pero que, por otra parte, siente que es su deber usar la palabra y su profesión como vehículo para denunciar los desastres del gobierno. "Las cosas que digo en las redes [son las] que siento que se están haciendo mal, que se están haciendo sin cabeza, que se están haciendo de forma absurda. Veo algunos vericuetos y los expongo en mi manera de ver las cosas, con humor, sea cual sea la decisión que tomen conmigo".
"[Denunciar lo mal hecho] no sólo es un derecho, es más que nada un deber de cualquier ciudadano de expresar sus desacuerdos, descontentos o frustraciones respecto a la economía, la política o la sociedad en un país. En mi caso muchas veces encauzo [este derecho] con mi profesión, le meto humor y no soy el primero que lo nota desde Aristóteles a la fecha: eso al poder no le gusta nada", manifestó.
El artista tiene clara la importancia de la voz de cada ciudadano, "todos y cada uno", como clave en el desarrollo y avance de la sociedad. "[El ciudadano] es importante en la consecución de las soluciones más inteligentes y/o consensuadas. Mientras menos participación más error. Una sociedad que respalda la participación de cada uno de sus ciudadanos no es otra que la más inteligente y por tanto la más avanzada. No se puede hacer casi ningún proyecto humano hoy en día sin que varios individuos se pongan de acuerdo en las decisiones: una toma de decisiones que parte de las miradas unilaterales inevitablemente fracasa en su misión".
"Los ciudadanos no debían "sentir". Su participación en las decisiones, su voz y su voto debían ser como los derechos reales del medioevo. El ciudadano debía nacer ungido de esos derechos (y deberes). Por obra divina vaya, sin que "te otorgo la potestad de...... ", continuó.
En abril de 2021 Toirac denunció que en la Televisión Cubana lo tenían silenciado y olvidado y relató que, por primera vez en muchos años, la televisora estatal del régimen pasó un personaje suyo, de los tantos que ha hecho en Cuba para ese medio. El humorista se refería a un episodio del show infantil “La Sombrilla Amarilla”.
“Y después de mucho tiempo sin que se notara en la TV Cubana que trabajé allí por 20 años, hoy desempolvaron un exquisito personaje que hice para "La Sombrilla Amarilla" encarnando a Don Quijote de la Mancha”, señaló entonces.
En más de una ocasión el humorista ha denunciado en sus redes sociales los abusos que comete el régimen y ha expuesto su opinión sobre los temas que aquejan, día a día, al cubano de a pie, algo que molesta a las “ciberclarias” (defensores del castrismo en redes).
Toirac expresó su apoyo a las protestas populares que sucedieron en Cuba en julio de 2021, porque "si dijera que no apoyo que la gente marche a la calle a exigir lo que sea, no sería consecuente con lo que he deseado para mi trabajo toda la vida”, precisó.