Asesora económica defiende la Ley de Reducción de la Inflación pese a que Biden admite que no se enfoca en la inflación

La asesora económica de la Casa Blanca, Heather Boushey, salió este martes en defensa  de la Ley de Reducción de la Inflación, a pesar de que el propio presidente Biden reconoció que el enfoque principal de la legislación no es combatir la inflación.

En una entrevista con el podcast "Pod Save America", Boushey respondió a los comentarios de Biden, quien dijo que la ley "tiene menos que ver con reducir la inflación y más con ofrecer alternativas que generen crecimiento económico".

La asesora afirmó que la ley sí apunta a reducir los precios, además de realizar inversiones verdes. "Como su economista, definitivamente se trata de inversión ecológica. Pero también de reducir precios", expresó.

Boushey argumentó que las disposiciones sobre energía limpia en la legislación, que Biden destacó, llevarán a una disminución de costos para las familias al facilitar la transición hacia fuentes renovables.

"Eso reducirá los precios para las familias. Hará que la transición a la energía limpia, mientras construimos esta nueva economía, conduzca a precios más bajos y menos volátiles", señaló.

La asesora agregó que la ley también incluye subsidios al consumidor y a las empresas para adoptar las nuevas tecnologías, además de medidas para reducir explícitamente los costos de atención médica.

"Así que sí se trata de los precios. Y luego, por supuesto, hay muchas cosas en esa legislación que reducen explícitamente los precios para las familias en términos de atención médica", afirmó.

Con sus declaraciones, Boushey buscó defender que la Ley de Reducción de la Inflación, aprobada por los demócratas el año pasado, sí está orientada a contener la escalada de precios, tal como indica su nombre, más allá del énfasis en inversiones ecológicas.

Todo esto, a pesar de que, en los hechos, ni las acciones del gobeirno ni de la Reserva Federal, a pesar de los reportes de bajas muy reducidas de la tasa de inflación, han logrado tener un efecto real en los precios, que es donde el consumidor percibe el impacto real de la inflación. Las altas tasas de interés, que suben mes tras mes, han acabado con el poder adquisitivo de la gente, porque los precios se mantienen por las nubes.