Cancillería peruana responde a injerencia de gobiernos de izquierda que defienden al golpista Pedro Castillo

La Cancillería peruana pidió este lunes a los gobiernos de Colombia, México, Argentina y Bolivia que respeten las decisiones que el país adopta tras la destitución del expresidente Pedro Castillo, quien intentó la semana anterior disolver el Congreso y establecer un "gobierno de excepción".

El Ministerio de Relaciones Exteriores respondió a través de un comunicado a estos cuatro gobiernos de izquierda que afirmaron que el exmandatario Castillo fue víctima de un "acoso antidemocrático" desde el día de su elección, y han pedido que sea restituido en su cargo y se respete la "voluntad del pueblo" expresada en las urnas.

“Las decisiones contrarias al orden constitucional y democrático que adoptó el expresidente Pedro Castillo Terrones el pasado 7 de diciembre" generó la decisión del Congreso "de declarar su vacancia (destitución) en el marco más estricto respeto a la Constitución Política del Perú", aclaró la entidad diplomática. 

Castillo intentó disolver el Congreso de la República e intervenir el Poder Judicial, el Ministerio Público, la Junta Nacional de Justicia, entre otras medidas que "constituyen un golpe de Estado", señaló la Cancillería. 

La detención de Castillo, acusado de "rebelión", generó una oleada de manifestaciones en las que han muerto al menos siete personas en el país. La Policía informó que en algunas de las protestas identificaron "infiltrados militantes activos de la organización terrorista Sendero Luminoso para alterar el orden público", según reportes de autoridades.

La presidencia del país fue asumida por Dina Boluarte, quien declaró este martes estado de emergencia "en las zonas de alta conflictividad social" y propuso adelantar las elecciones generales a abril de 2024, dos años antes de lo previsto.

El expresidente Castillo publicó el lunes una carta desde su centro de detención en la que llamó a Boluarte de "usurpadora". También dijo que es "incondicionalmente fiel al mandato popular y constitucional" que dice ostentar "como presidente" y afirmó que no renunciará a sus "altas y sagradas funciones".