Política
Exilio se manifiesta contra caravana de simpatizantes castristas que pedía el fin del embargo
Abril 25, 2022 3:17am
Updated: Abril 25, 2022 3:20am
Exiliados cubanos del sur de la Florida protestaron contra una caravana patrocinada por la organización procastrista “Puentes de Amor”, que regentea el cubano, simpatizante de la dictadura cubana, Carlos Lazo, quien en el pasado se ha reunido con el gobernante Miguel Díaz-Canel y ha cabildeado en círculos políticos estadounidenses a favor de la eliminación del embargo de Estados Unidos a Cuba.
La caravana, en el corazón de Miami, la capital del exilio cubano, buscaba expresarse a favor del levantamiento del embargo, pero los cubanos que salieron a confrontarlos en las calles del centro de la ciudad, dijeron que lo que buscan es “seguirle lavando el rostro a la dictadura cubana".
No es la primera vez que se organizan este tipo de caravanas, pues ya en junio de 2021 un grupo procastrista hizo lo mismo pidiendo el fin del embargo, que sigue siendo una prioridad estratégica para el régimen de La Habana.
"El embargo no es el motivo, el embargo no es la razón por la cual en Cuba hay una dictadura, y un pueblo está sediento de libertad y de necesidades, y de miseria, bajo esa dictadura", dijo, la cubana residente en Miami, Lisbet Mejías, a Telemundo 51.
Ramiro Collazo, uno de los manifestantes contra esta caravana, le dijo a Telemundo 51 que “quien está al frente de esto es Carlos Lazo, que es el líder de esta organización, que se llama Puentes de Amor. Él es un agente activo de la dictadura. Tras el 11 de julio, después de la violencia implementada por esa tiranía contra el pueblo cubano, este hombre le dio la mano al asesino de Díaz Canel".
Otro manifestante, Carlos Aragón aseguro a Telemundo 51 que "Esto no va a parar, hasta que se caiga la dictadura y haya democracia en Cuba”.
Según Telemundo 51, “Puentes de Amor ha hecho de la escasez de leche para el cubano, su bandera para pedir el fin del embargo, a pesar de que la leche se vende en las tiendas en moneda libremente convertible y no llega al pueblo”.
La realidad de la isla es ampliamente conocida: la producción de leche siempre ha sido un problema. El propio Raúl Castro dijo en un discurso que llevaban décadas prometiendo la autosuficiencia lechera de Cuba, y que era hora de que cada cubano se tomara un vaso de leche cuando quisiera. Sin embargo, muchos años después, la leche sigue escaseando y los niveles de producción de la isla están en los niveles del siglo XIX.