México: feministas denuncian secuestro y agresión policial a madre de una víctima de abuso

Feministas denunciaron en la Fiscalía de Chimalhuacán, un estado de México, que la defensora de Derechos Humanos, Irene Cervantes Martínez, madre de una víctima de abuso sexual, fue agredida por policías municipales tras ser detenida arbitrariamente el viernes.

Al salir de prisión la activista tenía signos de golpes y violencia sexual, según reportó La silla rota. Tres años atrás su hija también fue víctima del mismo abuso policial.

Los agentes detuvieron a Cervantes porque supuestamente viajaba en una motocicleta robada. Aunque la activista mostró los documentos de su propiedad, la arrestaron e incomunicaron por varias horas, según grupos feministas que la auxiliaron para salir de prisión.

"Los detuvieron y el pretexto fue que la moto era robada, pero ella traía los papeles de la moto. Me mandó mensaje para denunciar lo que estaba pasando, pero aun así se la llevaron a la comandancia municipal", declaró a Milenio, Lidia Florencio, madre de una víctima de feminicidio en Chimalhuacán.

Durante su arresto, Irene supuestamente fue pateada, le halaron los cabellos, la pisaron e incluso le apretaron el cuello. Los familiares y activistas que acudieron a buscarla a la comandancia municipal fueron informados de que ella no se encontraba en el lugar.

Tras quedar en libertad, Cervantes se trasladó a las instalaciones de la Fiscalía Regional de Chimalhuacán para iniciar una denuncia por agresiones y uso excesivo de la fuerza en contra de tres policías de tránsito y un efectivo de seguridad pública, agregó el citado medio.

El domingo, un grupo de mujeres encabezado por Irene Cervantes y Lidia Florencio realizó un plantón frente a la Fiscalía de Chimalhuacán, con la intención de exigir que se castigara a los policías que agredieron a la mujer. Sin embargo, un grupo de policías agredió al grupo, denunció La Silla Rota.

Videos divulgados en redes sociales muestran que las mujeres en el plantón fueron agredidas durante la manifestación. Según denunciaron las manifestantes, varios hombres en el lugar portaban armas largas "como una forma de intimidación".

Irene Cervantes se convirtió en activista en 2019, luego de que su hija, de 12 años en ese momento, fuera víctima de una presunta desaparición forzada. Dos miembros de la policía del Estado de México encargados de su búsqueda, habrían abusado sexualmente de la menor tras drogarla.

Desde entonces, ella y sus familiares afirman ser víctimas de hostigamiento por parte de las autoridades mexiquenses. Además, señalan que las investigaciones sobre el caso de la menor avanzan lentamente.