Junta militar de Myanmar ejecuta a cuatro activistas por la democracia

La dictadura militar de Myanmar (Birmania) ahorcó a cuatro presos, entre ellos dos destacados activistas prodemocráticos, durante el fin de semana, como parte de su política de represión a la disidencia tras el golpe de Estado del año pasado.

Las ejecuciones fueron anunciadas por la agencia de noticias controlada por el Estado, Global Light of Myanmar, la cual reportó que los hombres habían cometido "actos de terrorismo brutales e inhumanos" y fueron ejecutados de acuerdo con la Ley Antiterrorista y el Código Penal del país, informó VICE.

Entre los ejecutados se encontraban el veterano activista Ko Jimmy, de 53 años, y Phyo Zeya Thaw, un exartista de hip-hop de 41 años convertido en legislador del partido Liga Nacional para la Democracia de Aung San Suu Kyi, derrocada en el golpe militar de febrero de 2021. Los otros dos eran activistas menos conocidos, condenados por cargos de asesinato de un presunto informante de la junta.

Ko Jimmy y Zaya Thaw fueron declarados culpables y condenados a muerte por un tribunal militar a puerta cerrada por delitos relacionados con el uso de bombas, explosivos y financiación del terrorismo en virtud de la Ley de Lucha contra el Terrorismo, cargos que, según Amnistía Internacional, tuvieron una motivación política.

"Estas ejecuciones suponen una privación arbitraria de la vida y son otro ejemplo del atroz historial contra los derechos humanos en Myanmar. Los cuatro hombres fueron condenados por un tribunal militar en juicios muy secretos y profundamente injustos. La comunidad internacional debe actuar de inmediato, ya que se cree que hay más de 100 personas en el corredor de la muerte tras haber sido declaradas culpables en procedimientos similares", afirmó este lunes el director regional de Amnistía Internacional, Erwin van der Borght, en un comunicado.

Los militares del país transfirieron la autoridad para juzgar a civiles en tribunales militares especiales, donde se les juzga mediante procedimientos sumarios sin derecho a apelación, añadió el grupo de derechos humanos. Estos ahorcamientos pueden ser el primer uso de la pena capital en Myanmar en décadas. Tanto Phyo Zeya Thaw como Ko Jimmy perdieron sus apelaciones en junio, expuso BBC.

El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, fue uno de los líderes internacionales que condenó los asesinatos.

"No se pueden tolerar estos actos reprobables de violencia y represión. Seguimos comprometidos con el pueblo de Birmania y con sus esfuerzos para restaurar el camino hacia la democracia", escribió en su cuenta de Twitter, donde hizo mención del nombre con el cual era conocido previamente Myanmar.

La líder del Gobierno depuesto, Aung San Suu Kyi, se mostró "muy triste" tras conocer la noticia, pero no hizo ningún otro comentario, según declaró a la BBC una fuente cercana a ella.

La exconsejera de Estado de Myanmar ganó el Premio Nobel de la Paz en 1991 por su "lucha no violenta por la democracia y los derechos humanos". Actualmente está retenida por la junta militar desde el golpe de Estado en 2021.

Suu Kyi, lleva más de 18 meses detenida y está acusada de casi una veintena de delitos que le podrían suponer más de dos siglos entre rejas.