Sanciones contra la gimnasta amante de Putin podrían provocar ataque de Moscú

Dos meses después de la invasión rusa de Ucrania, la mujer que se cree que es la novia del presidente ruso Vladimir Putin ha evitado las sanciones que están afectando a otras figuras notables del Kremlin.

Alina Kabaeva, de 39 años, es una excampeona olímpica de gimnasia rítmica y se rumorea que tuvo cuatro hijos con Putin, incluidas unas gemelas. Los informes dicen que ella juega un papel en el ocultamiento de la riqueza del presidente ruso en el extranjero.

El Departamento del Tesoro de EE. UU. preparó un paquete de sanciones contra Kabaeva, pero lo suspendió en el último minuto por temor a que Putin lo tomara como un ataque personal, lo que aumentaría aún más las tensiones entre Rusia y EEUU por la invasión de Ucrania, informa The Wall Street Journal.

El riesgo de provocar la indignación parernal de Putin se complica aún más por el hecho de que controla el arsenal nuclear más grande del mundo. El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, ha advertido repetidamente sobre un posible ataque nuclear contra su país.

“Para ellos, la vida de la gente no es nada”, dijo Zelensky a Jake Tapper de CNN el 17 de abril. “Es por eso que no debemos… tener miedo. Estar preparados”.

Putin es notoriamente reservado sobre su vida personal, haciendo todo lo posible para proteger a sus hijos de los medios y el público.

“Tengo una vida privada en la que no permito interferencias. Hay que respetarlo”, dijo una vez. “Siempre he reaccionado negativamente ante aquellos que con sus narices mocosas y sus fantasías eróticas merodean en la vida de los demás”.

Kabaeva, quien una vez fue apodada "la mujer más flexible de Rusia", es una de las atletas más condecoradas en la historia de la gimnasia rítmica. Según los informes, se hospeda en Suiza en la casa de campo privada de una persona leal a Putin.

Una petición de Change.org que exige la expulsión de Kabaeva y sus hijos de Suiza alcanzó casi 75.000 firmas hasta el 25 de abril.

Los funcionarios estadounidenses le dijeron al WSJ que Kabaeva sigue siendo un objetivo potencial para las sanciones.