Derechos Humanos
Muere en prisión el disidente ruso y líder de derechos humanos Alexei Navalny
El activista ruso fue aclamado por muchos como un héroe de los derechos humanos, con una larga historia de liderar protestas contra el Kremlin en un país conocido por su brutal represión
Febrero 16, 2024 4:08pm
Updated: Febrero 19, 2024 5:44pm
El disidente y líder opositor ruso Alexei Navalny murió en prisión este viernes, según informes que citan a las autoridades rusas. El abogado y activista prodemocracia tenía solo 47 años en el momento de su fallecimiento y cumplía una condena combinada de treinta años y medio por cargos de extremismo.
En diciembre había sido trasladado de su antigua prisión a una colonia penitenciaria de “régimen especial” situada sobre el Círculo Polar Ártico, considerada una de las cárceles de mayor nivel de seguridad en el país euroasiático.
Navalny fue aclamado por muchos como un héroe de los derechos humanos, con una larga historia de liderar protestas contra el Kremlin en un país conocido por su brutal represión.
Durante un viaje de negocios a Rusia en 2020 trataron de envenenar al disidente, que sufrió una intoxicación grave, pero no mortal. Muchos le atribuyeron a Vladimir Putin el intento de asesinato de Navalny.
Mientras el líder de la oposición pasaba sus últimos años tras las rejas, el mandatario ruso ha estado enviando a miles de jóvenes de la nación a pelear en la guerra desatada por la invasión ilegal a Ucrania.
Según el Servicio Penitenciario Federal, Navalny se enfermó el viernes después de una caminata y perdió el conocimiento. Los informes añaden que un equipo médico intentó reanimarlo, pero los esfuerzos no dieron resultado.
“El 16 de febrero de 2024, en la colonia penitenciaria número 3, el recluso AA Navalny se sintió mal después de un paseo y casi inmediatamente perdió el conocimiento”, dijo en un comunicado el servicio penitenciario de la región de Yamalo-Nenets, adonde fue trasladado Navalny.
El comunicado añade que “los trabajadores médicos del centro llegaron inmediatamente al lugar y llamaron a un equipo médico de emergencia. Se llevaron a cabo todas las medidas de reanimación necesarias, pero no dieron resultados positivos. Los servicios de emergencia confirmaron la muerte del preso”.
La portavoz de Navalny, Kira Yarmysh, dijo que el equipo del político no tenía confirmación de su muerte y que su abogado viajaba a la ciudad donde estaba detenido.
La noticia de la muerte de Navalny provocó críticas de Occidente y de otros líderes disidentes. El presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, actualmente en Múnich, dijo que era “obvio” que Putin había orquestado la muerte de su mayor detractor.
Mikhail Khodorkovsky, un exoligarca petrolero de Yukos convertido en disidente, que también cumplió condena en una prisión rusa, dijo en X: “Si esto es cierto, entonces, independientemente de la causa formal, la responsabilidad de la muerte prematura recae en Vladimir Putin, quien primero autorizó el envenenamiento de Alexei y luego lo metió en prisión”.
La noticia “sólo subraya la debilidad y la podredumbre en el corazón del sistema que Putin ha construido. Rusia es responsable de esto”, manifestó el secretario de Estado Antony Blinken en la Conferencia de Seguridad de Múnich.
Asimismo, la presidenta de la Comisión de la Unión Europea, Ursula von der Leyen, expresó en X que la muerte de Navalny era un “sombrío recordatorio de lo que son Putin y su régimen”.
Por su parte, el jefe de la OTAN, Jens Stoltenberg, dio a entender que Moscú era responsable de la tragedia y dijo rotundamente que “Rusia tiene serias preguntas que responder”.