Régimen de Ortega cambia la Constitución para privar de la nacionalidad a “traidores a la patria”

La Asamblea Nacional de Nicaragua, controlada por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo, aprobó este miércoles una reforma a la Constitución Política que transforma el Estado al denominarlo “revolucionario” y otorga un poder total al dictador nicaragüense sobre los demás poderes del Estado.

La enmienda constitucional, aprobada de manera unánime en segunda legislatura y definitiva votación, establece la privación de la nacionalidad a los “traidores a la patria”, la que hasta ahora ha sido aplicada -sin que entrara en vigor- a 452 nicaragüenses, entre ellos, a los escritores Sergio Ramírez y Gioconda Belli; y a los obispos Rolando Álvarez y Silvio Báez.

La diputada orteguista Patricia Sánchez Urbina explicó que, según la Ley de Defensa de los Derechos del Pueblo a la Independencia, la Soberanía y Autodeterminación para la Paz, son considerados traidores de la patria quienes encabecen o financien un golpe de Estado.

También aquellos que alteren el orden constitucional, que fomenten o insten a actos terroristas, que inciten a la injerencia extranjera en los asuntos internos, pidan intervenciones militares, y se organicen con financiamiento de potencias extranjeras para ejecutar actos de terrorismo y desestabilización.

Asimismo, se privará de la nacionalidad a quienes propongan y gestionen bloqueos económicos, comerciales y de operaciones financieras en contra del país y sus instituciones, a aquellos que demanden, exalten y aplaudan la imposición de sanciones contra el Estado de Nicaragua y sus ciudadanos, y a todos los que lesionen los intereses supremos de la nación contemplados en el ordenamiento jurídico.

Según esa ley, los “traidores a la patria” no tendrán la opción de optar por cargos de elección popular sin perjuicio de las acciones penales correspondientes establecidas en el Código Penal.

La anterior reforma constitucional fue aprobada en la primera de dos legislaturas el 9 de febrero de 2023, el mismo día en que fueron excarcelados y expulsados hacia Estados Unidos 222 prisioneros nicaragüenses, entre líderes opositores, disidentes sandinistas, sacerdotes y críticos de la dictadura de Daniel Ortega.