Liberan sin fianza al hombre que atacó a una usuaria del metro de NY con sus heces

Un indigente que supuestamente arrojó sus propias heces a la cara de una mujer en una estación de metro de Nueva York bromeó con la policía y asegurpo que "esas cosas pasan" antes de su comparecencia del martes, tras la cual quedó en libertad sin fianza.

Frank Abrokwa, de 37 años, fue detenido el lunes en su refugio para indigentes por el repugnante ataque, registrado el 21 de febrero. Un vídeo lo captó arrojando una bolsa con sus excrementos a la cara de una mujer sentada en un banco del andén del metro de la calle Wakefield-241.

Abrokwa ha sido detenido 22 veces desde 1999, muchas de ellas relacionadas con agresiones físicas a transeúntes. Su última detención fue el 22 de febrero, un día después de su ataque, por supuestamente amenazar a un empleado de una ferretería al que asaltó con un destornillador.

También fue detenido el 8 de febrero por golpear a un conductor de autobús de Grehound en la terminal de autobuses de la Autoridad Portuaria.

Abrokwa se mostró indisciplinado durante su audiencia en el Tribunal Penal del Bronx, al tiempo que arremetió contra el fiscal por solicitar una orden de restricción para la víctima, de 43 años, y contra el juez, a quien preguntó: "¿Por qué me maltrata el sistema?".

La fiscal adjunta del Bronx, Grace Phillips, explicó que Abrokwa atacó a la víctima porque no se comprometió con él antes, cuando se acercó y le dijo: "Oye mami, ¿por qué no quieres hablar conmigo?".

Abrokwa habría decidido vengarse tras ser ignorado, por lo que entró en un vagón de metro cercano y defecó en una bolsa. "Luego volvió hacia la denunciante y rompió repetidamente la bolsa y le dejó sus heces en la cara, la cabeza, el cuello, los hombros y la zona de la espalda. Tenía heces en los ojos y en el pelo", explicó la fiscal, quien añadió que la víctima también tenía un corte en el interior del labio, así como la frente hinchada y enrojecida.

El ataque se produce en medio de una ola de criminalidad sin precedentes en la ciudad de Nueva York. El alcalde Eric Adams calificó el lunes el incidente como una "experiencia horrible por la que puede pasar cualquiera", informó el New York Post.

Abrokwa quedó finalmente en libertad sin fianza porque los cargos que se le imputaban no reunían los requisitos para obtenerla según las leyes de reforma de la fianza de Nueva York. También quedó en libertad sin fianza por su ataque con heces debido a la misma razón.

Sin embargo, los detectives de Brooklyn volvieron a detenerlo rápidamente por un delito de odio no relacionado el 9 de septiembre, en el que supuestamente se acercó a un hombre y le dijo: "Maldito judío, te voy a matar". A continuación escupió en el pecho de la víctima e intentó darle un puñetazo, según la policía.

En ese caso, Abrokwa fue acusado de acoso y amenaza, ambos como delitos de odio. Su comparecencia se programó para el miércoles por la mañana, según el New York Post.