López Obrador llama “amigo” a Trump y planea enviarle una carta pidiéndole que no cierre la frontera

El presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador dijo el viernes que el expresidente Donald Trump era “un amigo” y prometió acercarse a él para aconsejarle no culpar a los migrantes hispanos y latinos de los problemas de drogas en Estados Unidos, según un informe publicado por The Associated Press.

La decisión de López Obrador se produce a raíz de una afluencia masiva de inmigración ilegal en la frontera suroeste y un aumento de la entrada y consumo de fentanilo en la naciónnorteamericana, lo que ha tenido un impacto sensible en los estadounidenses.

Según el Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas (NIDA, por su sigla en inglés), que forma parte de los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por su sigla en inglés), las sobredosis de drogas aumentaron drásticamente entre 2019 y 2022, con un total de 107.941 sobredosis en 2022 y 73.838 muertes relacionadas con opioides sintéticos. Ese número representa un considerable aumento en la última década. En 2010 la cifra era de poco más de 21.000. Estos números, según el NIDA y los NIH, fueron corroboradas por los Centros de Control de Enfermedades (CDC, por su sigla en inglés).

AMLO trató de recurrir al expresidente republicano y candidato para las elecciones de este ciclo llamándolo “un hombre de inteligencia y visión”, a pesar de los enfrentamientos que ambos sostuvieron por temas relacionados con la frontera cuando las dos presidencias coincidieron.

Está previsto que el líder del partido MORENO y presidente de México deje el cargo a finales de este año, cuando la presidenta electa, Claudia Sheinbaum, asuma sus funciones el 1 de octubre. Sheinbaum será la primera mujer y la primera presidenta judía del país.

La historia de Trump con México es larga. Algunos han comparado a López Obrador con Trump en el sentido de que ha intentado revitalizar las políticas nacionalistas y el patriotismo, mientras que otros han marcado diferencias a raíz de los comentarios de Trump sobre el país vecino.

No fueron pocos los mexicanos y mexicano-estadounidenses se sintieron ofendidos por los comentarios del entonces candidato Trump en 2015 cuando dijo que muchos de los migrantes que llegaban a Estados Unidos eran “criminales, narcotraficantes, violadores”. También provocó rechazo su promesa de construir un muro a lo largo de toda la frontera suroeste y hacer que los mexicanos pagaran por ello, una indicación que López Obrador rechazó en repetidas ocasiones.

Una vez que Trump fue elegido y juró el cargo, sugirió que su Administración debería cerrar la frontera entre México y Estados Unidos “durante mucho tiempo”, a menos que AMLO encontrara una manera de impedir que los migrantes cruzaran. El presidente mexicano expresó su preocupación de que el cierre de la frontera pudiera tener consecuencias económicas no deseadas y sugirió que tal cierre dañaría las economías de ambas naciones, incluso, si durara sólo un mes.

Una carta que AMLO dijo que López Obrador planeaba enviar a Trump la semana pasada, decía: “Voy a demostrarle que los migrantes no llevan drogas a Estados Unidos”, y agregaba que “cerrar la frontera no resolverá nada y, de todos modos, no se puede hacer”, según The Associated Press.

“No durarían ni un mes con la frontera cerrada”, indicó, refiriéndose a fabricantes de automóviles y fabricantes estadounidenses que dependen de un suministro constante e ininterrumpido de piezas y productos terminados para sus plantas a ambos lados de la frontera.

López Obrador también señaló que había aumentado la preocupación sobre el traslado de plantas de automóviles estadounidenses a México para que las empresas automotrices estadounidenses pudieran encontrar trabajadores dispuestos a aceptar salarios más bajos. 

Según el presidente mexicano, trasladar las industrias automotrices de vuelta a Estados Unidos “significaría que, en promedio, cada automóvil vendido costaría a los ciudadanos estadounidenses entre 15.000 y 20.000 dólares más”, lo que, en última instancia, les costaría a los estadounidenses un fuerte aumento en el precio de los automóviles que compran.

Trump llegó a la presidencia en 2017 y López Obrador en 2018. Ambos tuvieron altibajos durante sus coincidencias presidenciales entre 2018 y 2020, a veces coincidiendo y otras discrepando en diversos temas.

El presidente mexicano ha intentado colaborar tanto con la Administración presidencial del republicano Trump como con la del demócrata Biden, utilizando la guardia nacional de su propio país en la frontera sur para evitar que los migrantes entren a México en su viaje hacia Estados Unidos.