China y cárteles mexicanos consolidan distribución de fentanilo por toda América

México es la principal fuente del fentanilo ilícito y sus análogos comercializados en Estados Unidos. Los cárteles mexicanos lo fabrican en laboratorios clandestinos, con precursores químicos provenientes principalmente de China, informó esta semana la Comisión Federal para Combatir el Tráfico de Opioides Sintéticos.

"En 2019, la República Popular China amplió los controles legales sobre las sustancias relacionadas con el fentanilo y el suministro se centró en México", señala el documento, elaborado por un grupo bipartidista de legisladores, expertos y funcionarios estadounidenses.

"Los opioides sintéticos de fentanilo son enormemente útiles para los narcotraficantes puesto que son tan potentes que con tan solo pequeñas cantidades se puede abastecer a una ciudad chica", explicó en entrevista con Infobae, Vanda Felbab-Brown, investigadora sénior del programa de Política Exterior del Centro para la Seguridad e Inteligencia del Siglo XXI en el Instituto Brookings.

Felbab-Brown, “investigó la más reciente forma de la ruta del fentanilo: de China como precursor a México y de ahí, principalmente a Estados Unidos y Canadá, así como Centro y Sudamérica”, reportó el citado medio.  

En 2019, el gobierno chino reglamentó la exportación de precursores de fentanilo bajo un sistema de licencias. Pero para entonces, los cárteles de Jalisco Nueva Generación (CJNG) y Sinaloa -los principales proveedores de esta droga- ya la elaboraban e incluso tenían conocimiento sobre costos mucho más bajos y lo “simple” que era traficarla.

"Los cárteles compran los precursores en China. Los llevan a México. Ahí lo convierten en fentanilo. Y después lo distribuyen mayormente hacia Estados Unidos. Pero en los últimos dos años empezaron distribuirlo en el mismo México", advirtió Felbab-Brown.

Para su tráfico hacia Estados Unidos, las organizaciones criminales utilizan principalmente "la frontera suroeste, pero también por barcos de pasajeros, barcos de carga, tren, aviones comerciales, drones y correo".

Según la Comisión Federal para Combatir el Tráfico de Opioides Sintéticos, la corrupción, las amenazas del crimen organizado y la renuencia de las autoridades mexicanas a reconocer el creciente problema de la producción ilegal del fentanilo son otros factores que contribuyen al problema.

"El gobierno mexicano debería ejercer mayores funciones relacionadas con la seguridad en las partes del territorio nacional donde organizaciones criminales tienen un bastión. La falta de recursos institucionales, la actividad limitada de las agencias reguladoras y la participación inadecuada de las fuerzas del orden locales han llevado a una supervisión insuficiente del comercio en los puntos de entrada donde los precursores químicos del fentanilo ingresan al país", expresa el informe de la Comisión Federal para Combatir el Tráfico de Opioides Sintéticos.

El documento también destaca que las sobredosis por drogas cuestan un billón de dólares anuales al gobierno de Estados Unidos. Se advierte además, que desde 1999 las sobredosis por drogas han matado a más un millón de personas en ese país, y las sobredosis mortales ascendieron a 100.000 fallecidos tan sólo entre junio de 2020 y mayo de 2021.