FBI abre investigación sobre el abuso sexual del clero católico romano de Nueva Orleans

El FBI abrió una investigación sobre décadas de denuncias de abuso sexual en la Arquidiócesis de Nueva Orleans, y los funcionarios quieren saber específicamente si los sacerdotes católicos romanos llevaban niños a través de las fronteras estatales para abusar de ellos, dijeron funcionarios a The Associated Press.

Según los informes, las autoridades han entrevistado a más de una docena de víctimas este año y están investigando si los clérigos depredadores pueden ser procesados ​​en virtud de la Ley Mann de 1910, una ley contra el tráfico sexual que no tiene un estatuto de limitaciones y prohíbe el transporte de personas a través de las fronteras estatales para el sexo ilegal.

La policía está revisando las denuncias de abuso durante viajes a campamentos y parques de diversiones en los estados vecinos.

"Ha sido un proceso largo y el solo hecho de que alguien tan en una posición tan alta nos crea significa mucho para nosotros", dijo un exmonaguillo a la AP, alegando que su abuso comenzó durante los viajes a Colorado y Florida en la década de 1970 cuando era un estudiante de quinto grado.

El arzobispo de Nueva Orleans, Gregory Aymond, se negó a hablar sobre la investigación.

"Preferiría no continuar con esta conversación", dijo a la AP.

"Esto es realmente un gran problema y debería ser alentador para las víctimas", explicó la profesora Marci Hamilton, directora ejecutiva de Child USA, una organización enfocada en la prevención del abuso. "El FBI rara vez se ha involucrado en los escándalos de abuso sexual del clero. Han arrastrado los pies en todo el país con respecto a la Iglesia Católica".

Uno de los sacerdotes bajo investigación es Lawrence Hecker, de 90 años, quien fue destituido de su cargo en 2002 luego de ser acusado de abusar de "innumerables niños".

Hecker se negó a responder a los reclamos. Cuando se le preguntó por teléfono la semana pasada sobre las acusaciones de abuso, respondió: "Voy a tener que colgar".

Las acusaciones más recientes incluyen aquellas contra Patrick Wattigny, un sacerdote que fue acusado por los fiscales estatales el año pasado después de que admitió haber abusado de un adolescente en 2013.