Estudiantes latinos representan cerca del 30% de todas las inscripciones en escuelas públicas

Los datos del Instituto de Ciencias de la Educación del Departamento de Educación de EE. UU. sugieren que las escuelas estadounidenses ahora tienen el doble de estudiantes latinos que en 1995 y se espera que este número siga aumentando. Los datos sugieren que para el 2030, los latinos representarán más del 30% de todas las inscripciones en las escuelas públicas. 

La tendencia en la matriculación de latinos debería impulsar a las escuelas y los legisladores a tomar medidas, según un reciente artículo de opinión del investigador principal del Century Institute, Conor Williams, publicado en Yahoo! Noticias. 

“La investigación sugiere que estos estudiantes aportan recursos significativos a la escuela y, cuando cuentan con el apoyo adecuado, pueden ser algunos de los estudiantes de mayor rendimiento del país”, escribió. 

“Con la capacidad de navegar a través y entre las diferencias culturales y lingüísticas, los estudiantes latinos aportan una multitud de talentos y activos que hacen que nuestras escuelas, y nuestro país, sean más fuertes”, indicó un informe reciente de UnidosUS, haciéndose eco de las palabras de Williams. 

Sin embargo, el sistema de escuelas públicas de EE. UU. no siempre ha reconocido ni valorado el potencial de los estudiantes latinos, argumenta Williams. En algunos casos, las escuelas públicas incluso han segregado a los estudiantes latinos de sus compañeros a través de “una variedad de métodos abiertos y encubiertos”.

“Los estudiantes de inglés, que tienen una probabilidad desproporcionada de ser latinos, son actualmente el grupo de estudiantes con más probabilidades de asistir a escuelas segregadas socioeconómicamente. Y, como deja claro el informe de UnidosUS , las escuelas han luchado particularmente para apoyar adecuadamente a los niños de estos orígenes durante la pandemia”, agrega Williams. 

La mayoría de las políticas estadounidenses tienen como objetivo mejorar la educación de los estudiantes de inglés. Si bien estas políticas también son necesarias para los latinos, no son suficientes para ampliar las oportunidades de este grupo. 

Según Williams, los legisladores pueden hacer algunas cosas para mejorar la educación de los estudiantes latinos.

Algunas de las sugerencias que hace Williams es que los legisladores diversifiquen las escuelas lingüísticamente, permitiendo que los estudiantes latinos y de otros orígenes tengan instrucción bilingüe, inscribiendo a niños pequeños que aprenden inglés en programas de educación temprana y diversificando la fuerza docente en las comunidades latinas con más maestros latinos. 

“Esta agenda simple contribuiría en gran medida a rectificar las desigualdades educativas de larga data y preparar a las escuelas públicas de EE. UU. para cumplir con la nueva demografía diversa que ya está llegando a sus puertas”, concluye Williams.