Pasar al contenido principal

Derechos Humanos

Criminales sexuales siguen explotando la porosa frontera sur

Agentes de Aduanas y Protección de Fronteras reportan la captura de pederastas, delincuentes sexuales y traficantes de personas

Diciembre 30, 2021 11:01pm

Updated: Diciembre 31, 2021 4:36pm

El juicio y condena de Ghislaine Maxwell significaron una gran victoria para los defensores de la lucha contra el tráfico sexual y centraron la atención pública durante un breve periodo en una atroz banda criminal. Sin embargo,  en la frontera sur de Estados Unidos se desarrolla una dolorosa realidad, en la cual los agentes de la Patrulla Fronteriza se encuentran casi a diario con individuos involucrados en actividades comerciales y sexuales ilícitas.

El periodo de fin de año no fue la excepción. Unos días antes de la Navidad, en un periodo de 24 horas,  agentes de la Patrulla Fronteriza del Sector de Laredo interceptaron tres intentos de contrabando de personas que dieron lugar a la detención de más de 70 ciudadanos extranjeros que se encontraban ilegalmente en Estados Unidos.

En uno de los intentos de contrabando se utilizó un remolque comercial robado, dentro del cual los agentes descubrieron a 52 personas originarias de México, Honduras, Guatemala y El Salvador que ingresaron ilegalmente a Estados Unidos y se dirigían al norte.

Otros intentos de contrabando, por ejemplo, con un vehículo todoterreno con siete mexicanos y otro con 12 mexicanos y guatemaltecos en su interior, ambos con destino al norte de Estados Unidos desde la frontera sur fueron frustrados, según la agencia de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP).

Todos las personas, incluidos los conductores, fueron puestos bajo custodia de la CBP. Sobre la operación, el Sector de Laredo comentó que sus agentes "seguirán manteniendo nuestro país y las comunidades a salvo de criminales peligrosos".

Además, los agentes de Laredo detuvieron un intento de contrabando de personas al sur de Hebbronville, Texas, en el cual 14 personas de Guatemala, México, Honduras y El Salvador quedaron detenidas. Todos estaban hacinados en un coche, algunos como sardinas en el maletero, para ser llevados al norte. Tras una persecución, algunos se dieron a la fuga y se internaron en la maleza, al norte de la comunidad de Guerra, Texas. Los detenidos fueron puestos bajo custodia de la CBP.

Dos días antes de Navidad, agentes de la estación de Eagle Pass detuvieron a un hondureño que en 2018 fue condenado por agresión sexual a un niño y sentenciado a cuatro años de prisión. El sujeto fue expulsado de Estados Unidos en 2020, pero volvió a entrar al país ilegalmente.

El mismo día, los agentes de la estación de Brackettville arrestaron a un ciudadano mexicano con una condena penal previa por actos lascivos con un menor de 14 años en 1999. El hombre fue condenado a seis años de prisión, fue deportado en 2019, pero reingresó ilegalmente a Estados Unidos.

"Estos arrestos resaltan la importancia de la seguridad fronteriza y lo que significa para la ciudadanía. Los agentes de la Patrulla Fronteriza se interponen entre la gente buena y aquellos que podrían hacerles daño. Sin importar las circunstancias, siguen dedicados a mantener a estos criminales fuera de sus comunidades", indicó el agente jefe de la patrulla del sector de Del Río, Jason D. Owens, en un comunicado.

Del mismo modo, en la víspera de Navidad, los agentes de la Patrulla Fronteriza, en colaboración con los oficiales del Departamento de Seguridad Pública (DPS) de Texas, detuvieron a cinco personas que eran objeto de contrabando dentro de una camioneta cerca de Mission. Una de ellas era una niña de 12 años de nacionalidad mexicana. El conductor, también de nacionalidad mexicana, intentó huir, pero fue detenido.

El congresista estadounidense Chip Roy (republicano de Texas) ha expresado su indignación por la política de fronteras abiertas del gobierno de Joe Biden, e incluso pidió la destitución del secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, por no cumplir su juramento de asegurar la frontera. La continua inmigración ilegal supone un peligro para los ciudadanos estadounidenses y para los inmigrantes que realizan el peligroso viaje, argumenta.

"Las fotos que he visto de niñas con marcas quemadas en sus cuerpos, porque han sido abusadas por los cárteles, las niñas que son vendidas para el tráfico sexual. Lo sabemos, las entrevistamos y descubrimos que han sido violadas en su viaje a través de México", comentó al podcast John Solomon Reports en una entrevista a principios de este año.

El día después de Navidad, agentes de la policía de Harlingen recibieron una llamada al 911 de un guatemalteco que había entrado ilegalmente en Estados Unidos en la que afirmaba que él y otras personas estaban retenidas contra su voluntad en una casa. Los agentes de la estación de la Patrulla Fronteriza de Harlingen y la policía acudieron al lugar, donde encontraron a siete personas que pusieron bajo custodia. Al parecer, eran retenidos por un ciudadano hondureño, quienserá procesado por cargos estatales, informó la CBP en un comunicado.

En otra aprehensión, los agentes de la Patrulla Fronteriza, ayudados por un K9, encontraron a cuatro salvadoreños escondidos dentro de un remolque transportado por un camión comercial después de que trató de cruzar un punto de control de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza. El remolque estaba cerrado con un cable metálico desde el exterior y quienes estaban dentro no habrían podido salir por sí mismos.

El mes pasado, agentes de la CBP en el puerto de entrada de Presidio (Texas) llevaron a cabo una gran redada al atrapar a una ciudadana estadounidense con una orden de detención pendiente por tráfico de niños con fines sexuales. Conducía un automóvil procedente de México con cuatro pasajeros en su interior. Tras realizar las principales inspecciones del vehículo y sus ocupantes, y conocer su orden de detención pendiente, fue detenida y entregada al Departamento de Policía de Presidio.

En la misma semana de su detención, los agentes de la CBP detuvieron a 31 personas buscadas por delitos relacionados con drogas peligrosas, hurto, robo, fraude, agresión, fuga de custodia, contrabando de extranjeros, agresión sexual a un niño y delito sexual a un niño.

"El presunto tráfico de niños inocentes con fines sexuales es un cargo atroz. CBP colabora con otras agencias de la ley para llevar a los que cometen delitos a la justicia", expuso el Director de Operaciones de Campo de CBP en El Paso, Héctor A. Mancha.

Estas aprehensiones excluyen las grandes incautaciones de narcóticos en el mismo periodo de tiempo. Del mismo modo, representan un pequeño porcentaje de las personas que son capturados al tratar de ingresar ilegalmente aEstados Unidos, según estimaciones los agentes. La mayoría de quienes eluden la captura, conocidos como "got-aways", tratan de evitar por completo los puntos de control de la patrulla fronteriza.  

El ex comisionado de la CBP, Mark Morgan, expresó recientemente en el podcast John Solomon Reports que hasta el 30% de las mujeres jóvenes y los niños son abusados en su camino a la frontera estadounidense.

"Los agentes de la Patrulla Fronteriza pueden contarte innumerables ejemplos en los que han entrevistado a una niña de 12 o 14 años que fue violada varias veces al llegar aquí. Por eso digo que lo más inhumano que puede hacer este país es tener políticas de fronteras abiertas para la inmigración ilegal", consideró.

"Simplemente aumenta esa tragedia que no se puede deshacer. No se puede recuperar a un migrante que murió, no se puede recuperar a una joven que fue violada varias veces. Lo mejor que podemos hacer es prevenirlo para detenerlo. Y eso implica asegurar nuestras fronteras y detener el flujo de la inmigración ilegal", añadió Morgan.