Bullying: qué es y cómo prevenirlo

El bullying o acoso escolar es un problema que afecta a muchas personas, especialmente a niños y adolescentes. Esta forma de acoso y maltrato puede dejar secuelas emocionales y psicológicas duraderas en las víctimas. Por eso, es esencial entender qué es el bullying, cómo identificarlo y qué medidas tomar para prevenir y afrontar las diferentes situaciones.

¿Qué es el bullying?

El bullying es un comportamiento agresivo y repetitivo llevado a cabo intencionadamente por una o varias personas con el objetivo de dañar, intimidar o humillar a otra que se encuentra en una posición de vulnerabilidad o inferioridad. Este comportamiento se manifiesta de diferentes formas, como insultos, burlas, exclusión social, difamación, amenazas, agresiones físicas o virtuales, entre otras.

Esta forma de violencia, en el caso de los niños, suele pasar desapercibida para padres y autoridades, quienes a veces lo consideran simplemente "cosas de chicos" y le restan importancia. Sin embargo, este fenómeno social puede causar enormes daños emocionales y psicológicos a la víctima, además de fomentar y normalizar la violencia en el abusador.

El bullying suele crear un clima de hostigamiento colectivo y aislamiento extremo para la víctima. Además, implica a todo el grupo, ya que muchos terceros se unen a la agresión por miedo a ser las próximas víctimas o porque se sienten protegidos y poderosos al estar del lado de los acosadores.

Tipos de bullying

Tipos de bullying | Shutterstock

• Bullying verbal: Se caracteriza por el uso de palabras hirientes, insultos, sarcasmos y rumores dirigidos a dañar la autoestima y el bienestar emocional de la víctima.
   
• Bullying social: Implica la exclusión deliberada y la manipulación de las relaciones sociales para aislar a la persona y generar sentimientos de soledad y rechazo.
   
• Bullying físico: Se refiere a la agresión física directa, como golpes, empujones o cualquier acto violento que cause daño físico a la víctima.
   
• Ciberbullying: Ocurre a través de medios digitales, como redes sociales, mensajes de texto o correos electrónicos, donde los agresores difaman, amenazan o humillan virtualmente a la víctima.

Causa y consecuencias del bullying

El bullying tiene sus raíces en el aprendizaje y el entorno de niños y adolescentes. Los estudios revelan que los agresores aprenden estos comportamientos de los adultos o de sus compañeros, imitando lo que observan. Si el comportamiento agresivo se refuerza positivamente, tiende a perpetuarse, pero si se rechaza, puede desaparecer.

El entorno y los "testigos" del acoso también desempeñan un papel crucial. Los valores culturales y sociales, tanto en la familia como en la sociedad en general, influyen en que se fomente o se frene la agresividad.

En las causas del bullying escolar intervienen factores emocionales. Los agresores pueden experimentar frustración y dificultades para controlar sus impulsos, utilizando la agresión como vía de escape. Además, buscan obtener beneficios sociales o poder de grupo a través de la intimidación, lo que requiere tolerancia y apoyo por parte del entorno.

En el entorno familiar, la violencia puede ser un factor contribuyente. La ausencia de un padre o la presencia de un progenitor violento puede influir en el comportamiento agresivo de los niños. Asimismo, las tensiones conyugales, la situación socioeconómica y la mala organización en el hogar también pueden afectar al comportamiento de los niños.

El bullying puede tener un impacto devastador en la vida de quienes lo sufren. Las consecuencias pueden incluir:

• Problemas emocionales: ansiedad, depresión, baja autoestima y sentimientos de desesperanza.
   
• Afectación del rendimiento académico: La víctima puede tener dificultades para concentrarse en clase y el rendimiento escolar puede verse afectado.
   
• Problemas sociales: Aislamiento, falta de confianza para relacionarse con los demás y dificultades para establecer vínculos afectivos.
   
• Riesgo de suicidio: En casos graves, el acoso puede conducir a pensamientos suicidas y autolesiones.

¿Cómo prevenir el bullying?

Niño mostrando el gesto de stop con su mano | Shutterstock

Prevenir y detener el acoso escolar es una responsabilidad compartida por toda la sociedad. Te presentamos algunas estrategias eficaces para abordar este problema:

Sensibilización

Es fundamental promover la educación y la concientización sobre el acoso en las escuelas, las comunidades y las familias. Ayudar a los niños a entender qué es el bullying y cómo afrontarlo con seguridad es fundamental. Dejar claro que el acoso es inaceptable y asegurarse de que los niños saben cómo obtener ayuda.

Comunicación abierta

Fomentar el diálogo entre padres, educadores y alumnos es vital para detectar posibles casos de bullying y proporcionar apoyo emocional. Escuchar a los niños con regularidad, conocer a sus amigos y comprender sus preocupaciones nos permite intervenir a tiempo.

Fomentar la autoestima

Promover actividades especiales, intereses y aficiones ayuda a aumentar la confianza de los niños, fomentar las amistades y protegerlos del bullying.

Políticas escolares

Es fundamental implantar políticas de prevención y establecer protocolos de actuación ante situaciones de acoso. Un entorno escolar seguro y respetuoso es clave para prevenir el acoso.

Apoyo psicológico

Proporcionar terapia y apoyo emocional a las víctimas es esencial para ayudarles a superar las secuelas del bullying y recuperar su bienestar emocional.

Implicación de la comunidad

La colaboración con instituciones, organizaciones y autoridades es esencial para crear un entorno seguro y respetuoso en la comunidad.

Precisamente el psicólogo Angelo Palomino señaló a ADN AMÉRICA que una herramienta fundamental para prevenir el bullying escolar es establecer una comunicación sólida y abierta, no sólo entre los padres y el niño, sino también con los padres de otros niños y amigos del niño. Esta comunicación fluida permite que un amigo del niño o incluso el propio niño pueda expresar si están viviendo situaciones de acoso.

Además, destacó la importancia de trabajar la autoestima del niño desde edades tempranas: “Cuando un niño tiene una buena autoestima y confianza en sí mismo, es más capaz de enfrentarse con eficacia al acoso escolar, ya que la base de este problema suele estar relacionada con una baja autoestima”, explicó.

Palomino subrayó que el trabajo sobre la autoestima y la confianza en sí mismo de un niño debe comenzar desde su nacimiento e incluso durante el tiempo que está en el vientre. “Los padres tienen un papel fundamental en este aspecto, ya que si ellos mismos tienen baja autoestima y poca seguridad, es probable que se lo transmitan a sus hijos”, señaló.

Además de la comunicación con los padres, el psicólogo recomendó establecer una estrecha comunicación con la escuela. Esto permite establecer parámetros y medidas de prevención, incluso cuando el niño no expresa explícitamente que está siendo acosado. Por ejemplo, si el niño muestra resistencia a ir a la escuela, podría ser un indicio de que está siendo afectado por el bullying, pero puede tener miedo de contarlo.

Casos de bullying más estremecedores en EEUU

• La historia de Drayke Hardman

Durante más de un año, Drayke Hardman, de 12 años, sufrió bullying escolar en su colegio de Utah, lo que lo llevó a tomar una decisión devastadora. A comienzos de 2022 las hermanas de Drayke lo encontraron en el suelo tras haberse intentado ahogar con una prenda de vestir. Pese a trasladarlo rápidamente al hospital más cercano, el niño falleció a la mañana siguiente.

Luego de quitarse la vida, sus padres decidieron hacer pública su historia en las redes sociales para tratar de concientizar el problema y erradicar estas prácticas.

El joven era un gran aficionado al baloncesto y soñaba con convertirse en jugador profesional en la NBA. Sin embargo, los abusos físicos y psicológicos que sufrió en la escuela fueron demasiado para él. De hecho, el pequeño había llegado una vez a casa con un moretón en el ojo y se había resistido a explicar su origen.

La familia lanzó una campaña con el hashtag #DoItForDrayke, con el objetivo de mostrarles a padres y familiares la importancia de enseñar a los niños a no incurrir en conductas abusivas. 

• Trágica pérdida de Adriana Kuch

Uno de los casos más impactantes ocurrió en un colegio de Nueva Jersey, donde una niña de 14 años llamada Adriana Kuch se quitó la vida tras sufrir una terrible paliza por parte de sus acosadores a comienzos de este año.

El ataque a Adriana se difundió a través de TikTok y Snapchat, lo que hizo la situación aún más dolorosa para la joven. Según su padre, Michael Kuch, los compañeros que la atacaron estaban celosos de la amistad de Adriana con otra alumna.

El video muestra cómo dos adolescentes atacan a Adriana mientras paseaba con su novio. A pesar de los intentos de su pareja por protegerla, las agresoras consiguieron tirarla al suelo y golpearla brutalmente.

Desesperada por la situación, Adriana llamó a su padre para contarle lo sucedido, pero lamentablemente el colegio no tomó medidas efectivas para detener a los autores del acoso. La falta de acción de las autoridades escolares hizo que Adriana se sintiera indefensa y humillada.

El fatal desenlace se precipitó cuando los videos de la agresión se hicieron virales en las redes sociales. Adriana, sintiéndose doblemente humillada, tomó la trágica decisión de quitarse la vida.