Crimen y Corrupción
Biden conmuta la pena de muerte de 37 reos federales a cadena perpetua a un mes de dejar el cargo
El mandatario demócrata ha emitido más conmutaciones en el final de su presidencia que cualquiera de sus predecesores recientes en el mismo momento de sus primeros mandatos
Diciembre 23, 2024 9:55am
Updated: Diciembre 23, 2024 9:55am
El presidente estadounidense Joe Biden conmutó este lunes las penas de 37 de los 40 condenados a muerte por la justicia federal, convirtiendo sus castigos en cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
La medida perdona la vida a las personas condenadas por homicidios, incluidos los asesinatos de policías y militares, de personas que se encuentran en territorio federal y de las implicadas en atracos mortales a bancos o en tratos con narcotraficantes, así como los homicidios de guardias o presos en instalaciones federales.
Esta decisión significa que sólo tres condenados aún enfrentan la pena de muerte: Dylann Roof, quien llevó a cabo los asesinatos racistas de 2015 de nueve miembros negros de la Iglesia Madre Emanuel AME en Charleston, Carolina del Sur; Dzhokhar Tsarnaev, un terrorista kirguís-estadounidense de origen checheno responsable del bombardero del Maratón de Boston de 2013; y Robert Bowers, quien disparó fatalmente a 11 congregantes en la Sinagoga Tree of Life de Pittsburgh en 2018, el ataque antisemita más mortal en la historia de Estados Unidos.
El mandatario demócrata ha emitido más conmutaciones en el final de su presidencia que cualquiera de sus predecesores recientes en el mismo momento de sus primeros mandatos, según indica la Casa Blanca en un comunicado. Por su parte, Trump defendió durante su campaña presidencial el uso de la pena de muerte para condenar a migrantes que asesinen a estadounidenses y a traficantes de drogas y de personas.
Biden está en contra de la pena de muerte y durante su gobierno el Departamento de Justicia emitió una moratoria sobre las ejecuciones en el sistema federal, que es distinto de las condenas emitidas por los jueces en los estados. Durante el primer gobierno de Trump, Estados Unidos suspendió una moratoria sobre las ejecuciones en la jurisdicción federal que regía desde 2003.
El escrito de la Casa Blanca sostiene que Biden "ha dedicado su carrera a reducir los delitos violentos y garantizar un sistema de justicia justo y eficaz" y "cree que Estados Unidos debe poner fin al uso de la pena de muerte a nivel federal, excepto en casos de terrorismo y asesinatos en masa motivados por el odio". Además, añade que la medida conocida hoy impedirá "que la próxima administración confirme las sentencias de ejecución que no se dictarían con la política y la práctica actuales”.