"La izquierda no descansa": Lafaurie responde a las acusaciones del exgobernador de Córdoba

El presidente de la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), José Félix Lafaurie, habló este jueves sobre las declaraciones que hizo ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) el exgobernador del departamento de Córdoba, Benito Antonio Osorio, donde lo acusa de tener presuntos nexos con grupos al margen de la ley. 

Osorio acusó a Lafaurie de sostener un encuentro privado con Salvatore Mancuso, un exjefe paramilitar condenado en Estados Unidos por narcotráfico. “De hecho, lo contactó, lo contactamos y Salvatore Mancuso puso como sitio de reunión la casa donde él había vivido con su exseñora esposa doña Marta Dereix en el barrio La Castellana”, dijo ante el tribunal de paz el exgerente del Fondo Ganadero de Córdoba.

Por medio de un comunicado emitido por Fedegán, el esposo de la senadora María Fernanda Cabal señaló que Osorio miente tal como lo hizo ante los tribunales de Justicia y Paz en 2011. Lafaurie agregó que esas acusaciones habían circulado hace diez años para buscar favorecimientos por parte de señalados criminales, y desde ese mismo momento, la credibilidad de Osorio fue desestimada, por lo que terminó condenado a 19 años de prisión.

El presidente de Fedegán tomó apartes de la audiencia ante la JEP para desestimar lo dicho por el exgobernador. 

“Osorio aceptó en diligencia judicial que ‘padezco de trastorno afectivo bipolar que permanentemente me derrota (...)’. Además, habrá que resaltar que solo un sociópata confiesa, como si nada, que ‘...yo tenía como que un ánimo de pirómano. Me gustaba ver la candela sobre esas chozas donde vivían los campesinos’”, puntualizó.

Para Lafaurie esta confesión sale a la luz con un trasfondo político detrás y que están siendo levantadas por la izquierda. “No sólo como parte de su objetivo de siempre, de estigmatizar al gremio ganadero, sino para enlodar con infamias la campaña de María Fernanda Cabal al senado de la República. La izquierda no descansa”.

En el comunicado también señaló que sobre la supuesta presión a la Corte Suprema de Justicia para la elección de Mario Iguarán como Fiscal General de la Nación, “es delirante sugerir que Mancuso tuviera semejante control sobre la Corte Suprema, sino una calumnia contra la corporación y contra cada uno de los 17 magistrados que Osorio pone automáticamente bajo sospecha”.

Insistió en que los magistrados no fueron presionados por parte de Mancuso. “No se puede olvidar que varios de esos magistrados, supuestamente bajo el control de Mancuso, fueron los mismos que, durante los años siguientes, profirieron las más duras sentencias contra paramilitares y parapolíticos”, agregó el ganadero.

Según el testimonio de Osorio, el interés de Lafaurie con la llegada de Mario Iguarán a la Fiscalía se trataría de un favor político y era la designación de su esposa, la como Directora de Asuntos Internacionales en la Fiscalía, función que la senadora Cabal desempeñó entre 2006 y 2007.

Las declaraciones del exgobernador de Córdoba señalan que Mancuso también tenía una importante agenda de contactos en la Corte, para poder ejercer presión en la elección del Fiscal. Además, añadió que en algún momento José Felix Lafaurie advirtió que Iguarán era una ficha clave puesto que podría ser “benevolente” con los ex paramilitares en su proceso de judicialización.