El Parqueo: la experiencia de ver películas en paredes de edificios de La Habana

El Parqueo, nombre de la iniciativa que cada vez gana más adeptos en La Habana, arrancó el 11 de marzo de 2023, con la idea de transformar un antiguo estacionamiento de autos, en un espacio de entretenimiento al aire libre. A casi un año de su estreno, proyectar películas en las paredes de un edificio capitalino se ha convertido en una alternativa económica y “querida” por el diverso público que asiste a las citas con el cine.

“Nuestra característica más distintiva es la proyección de películas en la pared de un edificio, recuperando la antigua tradición de los cines móviles e impactando en el paisaje nocturno y cultural de la zona costera de La Puntilla, Miramar”, explican los responsables, un plural grupo de jóvenes, algunos egresados de la Facultad Arte de los Medios de Comunicación Audiovisual (FAMCA), de La Facultad de Comunicación o del Instituto Superior de Arte, en sus redes sociales.

Vampiros en la Habana fue la primera cinta que se vio proyectada en las paredes de una construcción despintada, y tras pasar por la exhibición de cortos animados cubanos, El rey León, Elpidio Valdés, y muchas más, este fin de semana llegó el turno a Mulán, la gustada animación de Disney del año 1998.

Llamó poderosamente la atención que cada vez llegan más personas hasta el lugar para ver la película, y mientras se acomodan como pueden, en el piso, en los muros, en sillas que llevan, crece la expectativa de un proyecto que comenzó solo con las ganas y el impulso de unos cuantos.

 

 

 

 

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“El parqueo fue una idea que surgió de mirar por la ventana y ver a muchos niños sin nada que hacer en sus vacaciones. Ixchel convocó a un grupo de amigos nos contó su idea, a todos nos encantó y decidimos lo antes posible ponerla en práctica. Teníamos un proyector prestado, una bocina que nos facilitó un vecino y empezamos a hacer pruebas para determinar que pared sería la ideal para la proyección.”, comentó Leisa Capote, una de las promotoras, en exclusiva para ADN Cuba.

“Somos alrededor de 11 personas las que con todas las ganas del mundo estamos detrás de lo que sucede ahí”, aseguró Leisa en su mensaje.

También la joven recién graduada de FAMCA contó algunas experiencias al medio: “Recuerdo un día Patricia y yo entrando por una ventana del cuarto de Ixchel para poder sacar el proyector de ahí, porque se había quedado cerrado con llave, en par de horas proyectábamos e Ixchel estaba en Santiago de Cuba. O cuando Brayan tuvo que saltar por el alero del edificio para buscar la escalera que usamos como sostén, porque para nosotros es importante que cada proyección salga, y salga bien, porque ya tenemos un compromiso con las personas que van ahí”.

“Un pedacito de La Habana en nuestra casa de El Parqueo.”, se lee en la última publicación del proyecto en Instagram, perfil que acumula más de seis mil seguidores. Junto a la imagen del mensaje se pueden ver cientos de personas, atentos a la exhibición de la película.

Sobre su vivencia, Brayan Hernández, también nos comentó: “Una de las cosas que más me maravilla del proyecto El Parqueo, es cuánto ha crecido en asistencia desde la primera proyección (…) Estamos compartiendo alegría, y eso nos encanta. La experiencia de ver películas al aire libre, en modo picnic, sin barreras alrededor e interactuando con gente que se está divirtiendo tanto o más que yo; es de las experiencias más gratificantes que he tenido en mi vida.”

El profesor de Cine de FAMCA Gustavo Arcos, fue otro de los que celebró en Facebook la iniciativa: “Desde hace algunos meses, estas muchachas (algunas egresadas de la FAMCA) hacen algo maravilloso. Exhiben películas en la pared de un edificio, regresando a los orígenes del cine, con su encanto hacia lo natural y popular”, escribió en un post junto a varias imágenes que atestiguan la multitud para disfrutar del filme “bajo las estrellas”.  

Varios internautas además se hicieron eco de la importancia de proyectos culturales en un momento sensible de una Cuba marcada por la creciente pobreza y una ola de violencia sin antecedentes.