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"La sociedad de la Nieve": qué pasó con los 16 sobrevivientes de Los Andes tras el accidente
"La Sociedad de la Nieve" aborda la tragedia de los pasajeros a bordo del vuelo 571, de los cuales -45- solo sobrevivieron 16.
Enero 31, 2024 11:10am
Updated: Febrero 2, 2024 10:22am
La Tragedia de los Andes o el Milagro de los Andes fue un famoso accidente aéreo en el que el vuelo 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya se estrelló en la cordillera de los Andes el viernes 13 de octubre de 1972. El suceso se volvió mundialmente conocido por la supervivencia de 16 de los pasajeros que iban a bordo, luego de 72 días sufriendo penurias extremas, como la congelación, la sed y el hambre.
La tragedia inspiró la película “La Sociedad de la Nieve” de 2023, dirigida y escrita por J. A. Bayona, basada en el libro homónimo de Pablo Vierci. El filme no solo muestra el terrible accidente aéreo, sino también lo que tuvieron que hacer los 16 hombres para mantenerse con vida, según el sitio web de La Sociedad de la Nieve.
Pero, ¿qué fue de sus vidas tras ser rescatados de la cordillera 72 días después?
Fernando Parrado (Nando) fue quien, junto a Roberto Canessa, escaló a través de las montañas en un viaje de casi diez días para encontrar ayuda. Su trayectoria lo ha llevado a convertirse en un exitoso hombre de negocios, atleta y productor de programas de televisión. También se dedica a dar conferencias de superación personal en todo el mundo.
Roberto Canessa estudiaba medicina al momento del accidente, lo que ayudó mucho en la supervivencia. Al regresar a Uruguay se convertió en médico cardiólogo pediatra. En 2007 fue galardonado con el Premio Nacional de Medicina en 2007. Fue uno de los primeros en sugerir alimentarse de la carne de los fallecidos, rompiendo con ese tabú y probando el primer bocado.
Antonio Vizintín (Tintín) es actualmente el vicepresidente de la Union de Rugby del Uruguay (URU) y miembro del consejo de administración de la FUNDACIÓN VIVEN. Estuvo vinculado a la industria de envases plásticos por 13 años, como también a la industria alimenticia.
Gustavo Zerbino obtuvo una licenciatura en Dirección y Administración de Empresas y adquirió amplios conocimientos médicos, además de ser un gran orador. Fue el último de los supervivientes en abordar el helicóptero de rescate llevando consigo un bolso con objetos personales de sus amigos fallecidos.
Carlos Miguel Páez, hijo del destacado artista Carlos Páez Vilaró -quien buscó incesantemente a su hijo tras el accidente-, se convirtió en un técnico agropecuario, empresario, publicista, escritor y conferencista uruguayo.
Eduardo José Strauch desarrolló una destacada carrera como arquitecto en Montevideo. Tras el accidente, su papel fue esencial para la toma de decisiones, la organización efectiva del grupo y la desafiante tarea de proporcionar alimento.
Adolfo Luis Strauch tenía una carrera como ingeniero en agronomía cuando ocurrió el accidente. Desempeñó un papel innovador al inventar una máquina para derretir hielo, lo que devino una fuente crucial de agua para consumo. Su primo Eduardo le había persuadido en el último instante para que los acompañara en su viaje a Chile.
Daniel Fernández Strauch destacó al dirigir una empresa informática y tecnológica en Montevideo. Su naturaleza amable fue crucial para mantener la armonía en el grupo, actuando como un mediador durante las discusiones entre los supervivientes.
José Luis Nicolás Inciarte (Coche) era estudiante de Ingeniería Agrónoma y no formaba parte ni tenía vínculo directo con el equipo de rugby Old Christians. Unos amigos lo animaron a sumarse al viaje a Chile. En su jubilación, canalizó su pasión por la pintura. Falleció el 27 de julio de 2023 a la edad de 75 años. Fue el segundo de los sobrevivientes en morir.
José Pedro Jacinto María Algorta retomó sus estudios de Economía en la Universidad de Buenos Aires y luego obtuvo un MBA en la Universidad de Stanford, Estados Unidos. Más tarde, se estableció en Argentina, donde desempeñó el rol de director en una destacada fábrica de cerveza y bebidas.
Álvaro Mangino Schmid vivió muchos años en Brasil luego de la tragedia, pero regresó a Montevideo, donde hizo contribuciones al sector de la calefacción y los aires acondicionados. Durante el accidente, se fracturó la pierna izquierda y Roberto Canessa logró recolocarle los huesos. Tuvo que descansar en hamacas improvisadas para los heridos.
Roy Álex Harley alcanzó el éxito como ingeniero trabajando para un fabricante de pinturas. Tuvo un papel importante en el accidente al reparar un pequeño transistor que les permitió estar al tanto de las noticias relacionadas con las tareas de búsqueda.
Javier Alfredo Methol era el pasajero de más edad. Trabajó hasta su jubilación en la empresa tabacalera de la familia de Panchito Abal, jugador del equipo de rugby. El y su esposa Liliana, que falleció cuando quedó sepultada en un alud, decidieron aprovechar la oferta de los pasajes del avión para celebrar su aniversario de bodas con unas vacaciones en Chile. Fue el primero de los sobrevivientes de los Andes que falleció, el 4 de junio de 2015.
Roberto François (Bobby) actualmente se desempeña como técnico y productor agropecuario. Cuando ocurrió el accidente aéreo contaba con 20 años ; su cumpleaños número 21 lo pasó en la cordillera. Sus compañeros decían que parecía haber nacido sin instinto de supervivencia, ya que desde el momento de la tragedia, se sentó en la nieve, encendió un cigarrillo y dijo: “¡La quedamos!”.
Ramón Mario Sabella (Moncho) se dio cuenta del impacto inspirador que tenía la historia de supervivencia, así que decidió compartir su experiencia a través de conferencias y entrevistas y se convirtió en un empresario exitoso en el camino.
Alfredo Daniel Delgado concluyó sus estudios de derecho luego del accidente. Llegó a ser propietario de uno de los estudios notariales más prestigiosos de Uruguay. Cumplió sus 25 años en la cordillera, donde las heridas graves le impidieron moverse durante los 72 días.
