Díaz -Canel dice que después que pase la crisis hará "cambios profundos" en Cuba

El dictador cubano Miguel Díaz-Canel, afirmó este miércoles que cuando el país supere la actual crisis, habrá que poner en marcha "cambios más profundos en lo estructural para seguir avanzando en lo más estratégico".

Durante un diálogo con los llamados diputados a la Asamblea Nacional del Poder Popular el parlamento oficialista con miembros del Partido Comunista, el único tolerado por el régimen castrista, Canel señaló que la "prioridad" de su Gobierno es la tensa situación económica y social de la isla, según versiones reportadas por medios oficialistas de prensa.

Díaz-Canel dijo que se trabaja en la recuperación de la economía con "integralidad y articulación" enfocado a la solución de los problemas.

"Enseguida que salgamos de esta crisis económica-social que estamos viviendo, tenemos que hacer cambios más profundos en lo estructural para seguir avanzando en lo más estratégico", subrayó.

Cuba atraviesa una grave crisis económica debido a su fallido y totalitario régimen político, que más de 6 décadas después nunca ha podido solucionar la escasez de alimentos, medicinas y combustible. La dolarizada economía, la depreciación del peso cubano, los apagones cotidianos y la galopante inflación, tiene asfixiado al cubano de a pie, que tiene muy pocas esperanzas de que el régimen pueda resolver los graves problemas que enfrenta una sociedad completamente decadente social, política y económicamente.

La gravísima situación que vive la isla con una la migración que ha llevado a cientos de miles de cubanos a irse de la isla en los últimos 3 años, una represión política cada vez más brutal y cientos de presos políticos en las calles, parece estar en un callejón sin salida.

Canel reconoció que hay un "desequilibrio económico", pero explicó que se está desarrollando un programa de estabilización macroeconómica, que incluye acciones para contrarrestar la inflación, disminuir el déficit fiscal, superar las brechas entre el salario y el poder adquisitivo e incrementar la disponibilidad de divisas.

Como parte de ese programa Díaz-Canel consideró "una reforma fiscal, la recuperación del equilibrio monetario, la planificación y coordinación macroeconómica, el desarrollo de los mercados y las relaciones monetarias mercantiles, la entrada de divisas al país y también los elementos que tienen que ver con la dolarización y la competitividad".

También instó a producir más alimentos con el objetivo de bajar los elevados precios y lograr una mejor relación salario-precio, una de las insatisfacciones que aquejan a la población.

"Hay que recuperar el papel de la empresa estatal agropecuaria en la producción de alimentos", recalcó.

"Sabemos que la principal fuente de alimentos que le estamos dando a la población es la canasta (productos básicos distribuidos que entrega la cartilla de racionamiento) y que no alcanza. Todo lo que entregamos está sostenido sobre la importación, con más de 2,200 millones de dólares que gastamos en este concepto, porque nos cuesta mucho generarlo", apuntó.

En ese sentido, el mandatario refirió que cada vez se pueden comprar menos, debido a los altos precios de los fletes y de los alimentos.

Sobre las ventas de productos en moneda libremente convertible (MLC) apuntó que aún es necesario mantenerlas con el objetivo de recaudar divisas para reinvertir en la economía.

El seudo Parlamento cubano celebrará este jueves una sesión extraordinaria en la que discutirá el proyecto de Ley de Comunicación Social, una normativa que subrayó- "por primera vez en Cuba regula y sobre todo estimula la comunicación social del gobierno", que según establece en su “Artículo 55 de la Constitución reconoce a las personas la libertad de prensa, derecho que se ejerce de conformidad con la ley y los fines de la sociedad; y mandata al Estado a establecer los principios de organización y funcionamiento para todos los medios de comunicación social”. Una libertad de expresión que el castrismo nunca ha permitido ni permitirá.

Y habla de “contribuir a una sociedad democrática, justa, inclusiva, equitativa, participativa y solidaria, en armonía con el medio ambiente y en correspondencia con los principios del modelo económico y social cubano de desarrollo socialista”. Todo en medio de una dictadura que, por antonomasia, no cumple ninguna de esas descripciones.

En la práctica, la citada ley solo es una nueva ley mordaza, una nueva forma de controlar y castigar el uso de la libertad de expresión de los ciudadanos en los nuevos soportes digitales y en las redes sociales.

(EN ESTA NOTA SE UTILIZÓ INFORMACION DE EFE)