Muerte de Julián Figueroa: Qué es un infarto al miocardio y fibrilación ventricular

Julián Figueroa, hijo de la reconocida actriz y cantante Maribel Guardia y el difunto cantautor Joan Sebastian, fue encontrado muerto el domingo en la habitación de su casa en la Ciudad de México a la edad de 27 años.

El informe del médico reveló que Julián murió por un “infarto agudo al miocardio y fibrilación ventricular”, explicó Guardia en una publicación de Instagram.

Pero, ¿qué es un infarto al miocardio?

De acuerdo con la revista Mayo Clinic, el infarto agudo al miocardio (IAM), también conocido como ataque al corazón, ocurre cuando el flujo de sangre que llega al corazón se bloquea, generalmente debido a la formación de un coágulo de sangre en una arteria coronaria.

Como resultado, el corazón no recibe suficiente oxígeno y nutrientes, lo que causa daño en el tejido cardíaco y puede ser potencialmente mortal, como en el caso de Julián Figueroa.

Síntomas

Los síntomas del IAM incluyen sudoración, náuseas, falta de aire, dolor o presión en el pecho que puede irradiarse hacia el brazo izquierdo, cuello, mandíbula, espalda o abdomen, ansiedad o sensación de pánico, mareos.

Si no se trata de inmediato, puede llevar a complicaciones graves e incluso a la muerte.

Factores de riesgo

Existen varias causas que pueden aumentar la posibilidad de un IAM, como: la edad avanzada, el tabaquismo, la hipertensión arterial, el colesterol alto, la diabetes, la obesidad y la falta de actividad física.

Los antecedentes familiares de enfermedades cardíacas también pueden aumentar el riesgo.

Qué es la fibrilación ventricular

Además del infarto, Guardia también hizo hincapié en la fibrilación ventricular (FV), donde las cámaras inferiores del corazón se contraen de forma muy rápida y descoordinada. Como resultado, el corazón no bombea sangre al resto del cuerpo, explica Mayo Clinic. Es la causa más frecuente de muerte cardíaca súbita.

Síntomas

 Antes del episodio de FV, puedes tener síntomas de latidos cardíacos irregularmente rápidos o erráticos (arritmia). 

El colapso y la pérdida del conocimiento son los síntomas más comunes de fibrilación ventricular. Además, se puede presentar dolor en el pecho, mareos, náuseas y falta de aire.

Es recomendable acudir rápidamente a un cardiólogo si se tiene un latido cardíaco inexplicablemente rápido o fuerte.