Al menos cuatro muertos durante protestas en Sudáfrica por el alto precio de la energía

Por lo menos cuatro personas han muerto durante las protestas del lunes en el municipio de Thembisa, en Johannesburgo, por los elevados aumentos de los costes de los servicios públicos, informaron medios locales.

Los manifestantes bloquearon las carreteras con neumáticos en llamas e incendiaron un edificio público en el este de la capital económica de Sudáfrica por los precios de la electricidad.

Las autoridades sudafricanas informaron de la muerte de dos personas en presuntos tiroteos de la policía tras las protestas iniciadas en la mañana del lunes, dijo la portavoz de la policía de la ciudad, Kelebogile Thepa.

Horas más tarde, Thepa señaló que se habían encontrado otros dos cuerpos cerca de la entrada del edificio incendiado, con lo que el número total de muertos ascendió a cuatro. La policía aún no ha confirmado la causa de las muertes; la investigación está en curso.

Las protestas por las deficiencias de los servicios se producen con regularidad en Sudáfrica, que se enfrenta a una de las tasas de desempleo y delincuencia más altas del mundo, informó la agencia de noticias Aljazeera.

Los cortes de electricidad también se han hecho frecuentes en los últimos meses, ya que la empresa nacional de servicios públicos Eskom lucha contra sus elevadas deudas y una huelga laboral.

Los cortes programados comenzaron hace dos semanas ( algo ya habitual en el país), pero su frecuencia ha aumentado desde el pasado lunes, de modo que los residentes de lugares como la ciudad de Johannesburgo sufren entre dos y tres cortes de dos horas y media cada día.

El último estallido de protestas se produjo menos de dos semanas después de que el expresidente Thabo Mbeki advirtiera de que el país podría ser testigo de un levantamiento similar al de la Primavera Árabe, provocado por el creciente descontento.

Una advertencia similar hizo el pasado viernes el controvertido opositor sudafricano, Julius Malema, sobre una inminente revuelta similar a la "Primavera Árabe" que tendrá como objetivo a los blancos y a las "élites negras".

El actual presidente Cyril Ramaphosa, en una declaración reciente a la nación, reconoció un "momento difícil para nuestro país". Pero en otro discurso, respondió a las críticas de Mbeki y dijo que su partido tiene un plan para arreglar las cosas.

Un grupo de manifestantes exigió la destitución del gobernador sudafricano, así como la reducción de los precios de los combustibles, un fin urgente de los cortes de electricidad y un aumento salarial del 12% para todos los funcionarios públicos.