Narcotráfico
Cártel Jalisco pide a sus rivales no atacar a sacerdotes: “Que la guerra sea entre nosotros”
El mensaje, dado a nombre de Nemesio Oseguera Cervantes, "Mencho", también propone que no se ataquen a doctores ni profesores
Julio 8, 2022 3:13pm
Updated: Julio 8, 2022 3:14pm
Un grupo de sicarios presuntamente vinculados al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) hizo un llamado este jueves a sus rivales en el narcotráfico pidiendo que "no se metieran con ninguna religión, especialmente con los católicos".
Pide #CJNG no molestar a la población tras denuncias de cobros a iglesias, hospitales y negocios así como evitar retenes
— Con Seguridad Jalisco (@conseguridadjal) July 7, 2022
Así las cosas en #Jalisco #alertajalisco #inseguridad #ZMG #Guadalajara #Zapopan #Tlajomulco #Tlaquepaque #Tepatitlan #Arandas pic.twitter.com/SzZHO8cUTd
En un video publicado en redes sociales, se observa al grupo, de aproximadamente 15 hombres, con armas y equipo militar. Uno de los miembros emite el mensaje a nombre de su "patrón" (jefe), Nemesio Oseguera Cervantes, alias "Mencho" —presunto líder del CJNG, actualmente buscado por autoridades mexicanas y estadounidenses—, en el cual llama a las bandas criminales a no meterse con religiosos.
"Me comunico con todos los cárteles para invitarlos a que la guerra sea entre nosotros, no meternos con quien no nos debemos de meter. No meternos con ninguna religión, ni sus pastores o seguidores, especialmente con los católicos. No molestar a los sacerdotes como se ha estado viendo últimamente. Creo, ellos, se merecen un respeto especial: son personas que solamente se dedican a dar la palabra de Dios y ayudar a quien lo necesita", señala el presunto sicario.
El mensaje también propone a los narcotraficantes no atacar a doctores ni profesores.
"Mi cártel no se mete con ninguna religión, no molestemos (a) doctores ni maestros. Atentamente Mencho Oseguera. Puro CJNG. Somos gente con la gente", concluye la grabación.
El mensaje surge a casi tres semanas del asesinato de los sacerdotes jesuitas Javier Campos y Joaquín César Mora, ocurrido a finales de junio en el municipio de Urique, en el estado mexicano de Chihuahua.
Las autoridades mexicanas creen que los sacerdotes fueron asesinados por José Noriel Portillo, alias "Chueco", presuntamente por haber intentado proteger a Pedro Palma, un guí a de turistas que llegó a la parroquia de San Francisco Javier luego de escapar del presunto miembro del Cártel de Sinaloa.
Portillo ha sido vinculado con actividades de narcotráfico, tala ilegal, así como el control sobre grupos de sicarios en la sierra Tarahumara. Según un sacerdote entrevistado por Radio Fórmula, "Chueco" habría confesado al sacerdote Jesús Reyes el asesinato de los jesuitas.
