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Política

El presidente de Colombia ve oportunidad en el cannabis para uso medicinal, pero no en la coca

Iván Duque, presidente de Colombia, expresó su esperanza en el potencial que tiene la industria de la marihuana terapéutica, en un país que libra una costosa guerra contra la cocaína. The Associated Press entrevistó al mandatario durante su visita a Israel.

Noviembre 10, 2021 6:14pm

Updated: Noviembre 10, 2021 6:16pm

Iván Duque señaló que la promoción del cannabis para uso médico, entre otros, es “una historia distinta” a la de la cocaína que, entre otras cosas, es terrible para el medio ambiente.

“Para sembrar una hectárea de coca en Colombia se destruyen dos hectáreas de jungla tropical”, aseguró el mandatario. “Además, la producción de cocaína deja una enorme huella de carbono. Se utiliza mucha gasolina, mucho cemento”, y las sustancias químicas con las que se procesa dañan la selva, agregó. A lo anterior se añade el accionar violento y criminal de los capos del narcotráfico, los cárteles y grupos ilegales, entre estos las disidencias de las FARC, que continúan con sus actividades mafiosas en las selvas colombianas.

Duque defendió su récord de gobierno en lo que respecta al medio ambiente, destacó que creó el primer consejo nacional contra la deforestación en el país, respaldó una iniciativa para incrementar las penas por delitos ambientales y se comprometió a reducir la deforestación a cero para el año 2030.

Durante la cumbre de cambio climático de Naciones Unidas, en Glasgow, el mandatario prometió convertir el 30% del territorio nacional en áreas protegidas para cuando culmine su gobierno. Los parques nacionales y reservas en manos del gobierno actualmente ocupan alrededor del 15% del territorio colombiano.

Tras participar en la cumbre climática de Naciones Unidas, el gobierno de Colombia se comprometió a alcanzar la neutralidad en emisiones de carbono para el año 2050, y con la apertura del centro de innovación de Colombia en Jerusalén, el presidente Duque se mostró abierto a discutir la manera en que Colombia e Israel —autodenominadas “naciones startup”— pueden colaborar para hacer del mundo un mejor lugar, indicó AP.

“La innovación probablemente es la solución a la mayoría de nuestros problemas. Incluso aquellos creados por la innovación deberán resolverse con innovación”, dijo Avi Hasson, director general de Start-Up Nation Central, que conecta a gobiernos y negocios internacionales con emprendedores israelíes, y el cual contó con la presencia de Duque en una mesa redonda este martes.

Israel, por su parte, legalizó la marihuana hace años, y de los nueve millones de habitantes que tiene el país, más de 100.000 cuentan con permiso de uso. De hecho, Israel aprobó la exportación de marihuana en 2019, convirtiéndose en el tercer país en hacerlo. Ese país cuenta con más de 110 compañías tecnológicas enfocadas en el cannabis, la mayoría de ellas en el sector médico. Esas empresas han atraído una inversión cercana a los 350 millones de dólares desde 2015, según Start-Up Nation Central. Israel también es uno de los principales importadores de la flor de cannabis medicinal, puntualizó la oficina de AP en Tel Aviv.

En julio, Colombia retiró la prohibición a la exportación de la flor seca del cannabis. El presidente Duque dijo que Colombia buscará aprovechar todos los derivados de la planta, desde tratamientos médicos o la producción de alimentos hasta la industria cosmética. “Estamos viendo mucha inversión internacional que llega a Colombia”, declaró. 

Lo anterior, sin embargo, no da vía libre al uso y consumo de drogas o de la marihuana con fines recreativos. El presidente conservador expresó que existe una diferencia entre aprovechar los componentes benéficos de las drogas y levantar por completo su prohibición. “No usamos cannabis con fines recreativos. Lo usamos con fines medicinales”, enfatizó.

Iván Duque asumió la presidencia criticando la forma en que las drogas “destruyen” familias, y ya en el gobierno firmó un decreto para prohibir la posesión de drogas en espacios públicos, con ello contravino un fallo del máximo tribunal del país que les permite a los colombianos portar pequeñas cantidades de marihuana, cocaína y otros narcóticos, recordó AP.

La agencia de noticias observó que el presidente está comprometido en reanudar la erradicación aérea de plantaciones de coca, responsables del repunte en la producción de cocaína, aunque los obstáculos legales y las protestas de campesinos le han impedido avanzar en ese objetivo.

El medio también precisó, siguiendo un reporte del International Crisis Group, que en los años posteriores al acuerdo de paz, diferentes grupos ocuparon el vacío que dejó la extinta guerrilla de las FARC, desde ganaderos, madereros, mineros y granjeros de subsistencia, hasta grupos criminales. 

Incluso, "Colombia perdió 747.000 hectáreas (2.885 millas cuadradas) de bosque durante los cuatro años posteriores al acuerdo de paz de 2016, un área 10 veces más grande que la ciudad de Nueva York, según el Instituto Nacional de Estudios Ambientales. En comparación, se perdieron aproximadamente 562.000 hectáreas (2.170 millas cuadradas) de bosque en los cuatro años previos a 2016, cuando muchas partes del país estaban fuera de cualquier alcance debido a la presencia de las FARC", abundó AP.

Colombia es uno de los países más peligrosos del mundo para los defensores del medio ambiente, unos 65 ambientalistas fueron asesinados sólo en 2020, lo que representa casi la tercera parte del total mundial de 227, según el grupo de derechos humanos Global Witness. El presidente Duque ha responsabilizado de los asesinatos de ambientalistas a los cárteles del narcotráfico.