Caro Quintero disputa territorio a ‘El Mayo’ e hijos de ‘El Chapo’ en Sonora

Rafael Caro Quintero está de regreso en el crimen organizado mexicano. El 18 de mayo de 2020, dejó un mensaje en dos cuerpos descuartizados donde advierte que la plaza de Caborca, Sonora, le pertenecía, por lo que ahora los productores, mineros y comerciantes de la zona debían pagarles un derecho de piso.

Datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública muestran que en 2018 se registraron 25 homicidios dolosos en Caborca. Un año después, los asesinatos llegaron a 32, mientras que en 2020 sumaron 127. Hasta septiembre de este año van 92 asesinatos.

El aumento se atribuye a los enfrentamientos entre el grupo de Caro Quintero –miembros de La Línea (ex cártel de Juárez) y del cártel Jalisco Nueva Generación con los lugartenientes de Ismael ‘El Mayo’ Zambada y de los hijos de Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán, destaca un informe de inteligencia consultado por Milenio Diario.

Tras dejar la prisión en 2013, Caro Quintero se trasladó al municipio de Matachí, Chihuahua, con su última esposa, Diana Espinoza Aguilar. Entonces, hizo saber al gobierno y a los capos locales que no estaba interesado en regresar a los negocios ilícitos.

El 16 de enero de 2015, la PGR emitió una nueva orden de aprehensión en su contra. Entonces, ‘El Mayo’ ofreció a Caro Quintero refugió al norte de Badiraguato, Sinaloa. Sin embargo, el viejo capo tuvo que escapar hacia El Batamote, Sonora, donde fue recibido por Jesús González Pañuelas, relacionado con la familia de ‘El Chapo’ Guzmán.

La cacería de las autoridades lo obligó a huir una vez más. Debido a eso, Caro Quintero convocó en 2017 a una reunión con sus subalternos. Ahí discutió un plan para recuperar el mando en Sonora, a partir de una nueva organización criminal, El cártel de Caborca.

Según la Oficina de Investigaciones Federales (FBI), Caro Quintero ocupa una posición de liderazgo activo en el tráfico de drogas desde México. En sus documentos, también figura con el título de “cártel de Sonora” el cual era visto inicialmente como parte del cártel de Sinaloa, informa Excélsior.

Caro Quintero pudo aliarse con esa organización, pero prefirió reclamar su derecho de antigüedad, según los reportes de inteligencia consultados por Milenio. Así, dio forma a su brazo armado, La Barredora 24/7, además de formar una alianza con La Línea, a través de Jesús Salas Aguayo, ‘El Chuyín’, quien destaca en la lista de los más buscados de la Administración de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA).

La lucha entre Caro Quintero y el cártel de Sinaloa habría sido una de las causas asociadas con los homicidios de seis menores y tres mujeres de la familia LeBarón, ocurridos en noviembre de 2019 en Bavispe, Sonora.

Adrián LeBarón, padre y abuelo de las víctimas, asegura que detrás de esos asesinatos estuvo Caro Quintero. Dos de los presuntos homicidas, Rodolfo González Montes, ‘El 32’, y Fredy Calles Romero son identificados como subordinados de ‘El Chuyín’, aliado de Caro Quintero.

El cártel de Caborca se ha convertido en una amenaza seria para la paz. Su presencia se asocia con el aumento en 20% de los homicidios en Sonora, donde Caborca se ubica como uno de los cinco municipios con mayor cantidad de asesinatos.

En agosto de 2013 un tribunal federal mexicano ordenó revocar la sentencia de 40 años contra Rafael Caro Quintero. Entonces, dejó el Penal de Puente Grande, donde purgaba una pena por el asesinato del agente de la DEA Enrique Camarena y de un piloto del gobierno de Estados Unidos. Meses después, la Suprema Corte de Justicia anuló el fallo, por lo que desde entonces es considerado un prófugo.