Bebé muere en hospital de Cuba y no había carro fúnebre ni ataúd para trasladarla

Cerca de ocho horas tardó en llegar un carro fúnebre a recoger el cuerpo de Ainoa, una bebé fallecida el miércoles en el hospital de Trinidad, en la provincia cubana de Sancti Spíritus.

La muerte ocurrió aproximadamente a las 2:00 a.m, en el Hospital General “Tomás Carrera Galiano”. Una fuente familiar afirma que la presunta causa del fallecimiento sería “tres paros y dicen que no pudieron detectar si tenía algún problema en el corazón”.

A su vez, un amigo cercano a la familia aseguró que la niña “nació en perfectas condiciones, automáticamente la bajaron para la sala, supongo que haya que mantenerla en observación y nada de eso existió. Cuando la niña fallece ni un médico fue capaz de dar la cara para explicar nada”.

La fuente, que pidió anonimato, dijo también a ADN Cuba que la familia residente en el barrio Las Piñas está devastada, pero que el padre de la bebé autoriza a divulgar el caso “porque la falta de respeto fue muy grande”.

Según el testimonio, apoyado con fotos donde presuntamente se ve el cuerpo de la bebé bajo una manta, “la tenían en una camilla en el corredor del pasillo [en el hospital], puesta ahí, tapada ahí, no más”.

De acuerdo con el entrevistado, “la niña había fallecido desde las dos de la mañana y nada, eran las diez de la mañana y ningún carro [aparecía]. Cuando llega trae una camillita y todo el mundo empieza a protestar y a decir que cómo van a poner a esa bebé allí, que cuando eso [el vehículo] empiece a coger baches se caerá para todos lados la criatura”.

ADN Cuba tuvo acceso a un video en el que se ve a una decena de personas expresando su descontento a los empleados de los servicios necrológicos por las condiciones en que pretendían trasladar a la niña fallecida. “Esto es un abuso” y “eso no es un perro” fueron algunas de las exclamaciones de los que protestaban.

“Nosotros no tenemos culpa. Se sabe que es un bebé, pero si a nosotros nos dicen 'cojan una camilla', es la camilla. Si nos hubieran dicho 'cojan una cajita…'”, responde un trabajador funerario en el video.

Finalmente, el carro fúnebre se retiró y regresó luego con un pequeño féretro, según nuestra fuente, “para entonces llevarla para Sancti Spíritus [ciudad] y allá hacerle autopsia antes de regresarla para ser velada en la funeraria de Trinidad”.

Hace poco más de un mes ADN Cuba informó sobre el fallecimiento de la bebé cubana en un hospital, Kendall Natascha Blanco Estrada, de siete meses, que murió en la sala de terapia intensiva del Hospital Pediátrico “José Luis Miranda”, de la provincia Villa Clara, luego de una neumonía complicada y fiebre alta durante varios días.

Yanisbel Valido, abuela paterna de la pequeña, declaró que era una niña sana al nacer, pero que luego de una vacuna que le pusieron con meses de atraso, la historia cambió drásticamente. 

“Le dio fiebre y fuimos para el hospital. Los médicos dijeron que era normal el comportamiento. Luego se puso peor y de nuevo para el hospital. Entonces le pusieron antibióticos y nada. La niña estaba dos días en la casa y cinco en el Infantil ingresada. Esta última vez le dieron de alta, llega a la casa, comienza con falta de aire y la mamá la lleva de nuevo al hospital”, contó Valido.

El último ingreso de la menor fue el 4 de septiembre pasado y desde ese día permaneció en terapia intensiva hasta su muerte, ocurrida el 13 de septiembre, a causa de una “sepsis generalizada”, según dijeron los médicos a la familia.

Respecto al caso de Kendall Natascha, el doctor cubano Alexander Jesús Figueredo, exiliado en Estados Unidos, explicó que ha recibido siete denuncias de pacientes de entre uno y tres años de edad “que, con fiebre, abundante tos y sin hacerles exámenes los están enviando para la casa, sin seguimiento por su área de salud, sin medicina y solo con un RX diciéndoles que está negativo”, añadió.

“En Cuba están dejando morir los niños, las pruebas las tengo y el pueblo lo sabe”, concluyó Figueredo.