Pandillas ecuatorianas desatan ola de terror: encapuchados armados se toman un canal de televisión

Una ola de terror ha golpeado a Ecuador: pandillas criminales han secuestrado a agentes de policía y detonado una serie de bombas.

Encapuchados armados ingresaron este martes en el canal de televisión TC, en la ciudad de Guayaquil, en el suroeste de Ecuador, y sometieron a su personal durante una transmisión en vivo.

En las imágenes en vivo se ve a varios encapuchados con armas que mantenían en el piso a trabajadores del canal a quienes exigían que pidieran en directo a la Policía que se retirara del lugar.

El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, reconoció en un decreto la existencia de un "conflicto armado interno" en el país y ordenó a las Fuerzas Armadas ejecutar acciones milites "bajo el derecho internacional humanitario y respetando los derechos humano".

Además, grupos de reclusos se han apoderado de docenas de guardias solo horas después de que el presidente Daniel Noboa declarara el estado de emergencia, todo esto tras la fuga del líder de pandilla más peligroso del país.

En un intento de recuperar el control tras la evasión de Adolfo Macías, alias "Fito", líder convicto de la poderosa banda de drogas Los Choneros, miles de soldados y policías se despliegan en la búsqueda mientras el caos estalla dentro y fuera de las cárceles, en lo que parece ser un acto de fuerza por parte de bandas criminales organizadas contra el nuevo presidente.

Noboa, elegido en octubre con la promesa de combatir la delincuencia violenta, decretó el lunes un estado de emergencia de dos meses, comprometiéndose a retomar el control de las cárceles del país, escenario constante de violentos enfrentamientos entre bandas narcotraficantes que han dejado más de 420 reclusos muertos desde 2021. "Ante esto, estos supuestos grupos narcoterroristas intentan amenazarnos y creen que cederemos a sus demandas", declaró Noboa en un mensaje en redes sociales.

A pesar del estado de emergencia, su impacto parece haber sido limitado, ya que tres policías fueron secuestrados en la ciudad sureña de Machala y otro desapareció en la capital, Quito.

Se cree que decenas de guardias más fueron tomados como rehenes en cárceles de todo el país el martes, lo que se suma a los eventos del lunes, aunque la autoridad penitenciaria de Ecuador no ha proporcionado más detalles. Videos compartidos en redes sociales muestran a carceleros aparentemente tomados como rehenes por miembros de pandillas enmascarados, armados con pistolas y cuchillos, leyendo declaraciones idénticas dirigidas a Noboa.

El líder de la banda desaparecido, Macías, de 44 años, se esfumó de la prisión el domingo durante un traslado a una instalación de máxima seguridad en Guayaquil, la ciudad portuaria que está en el centro de la brutal caída de Ecuador en la violencia, que ha visto aumentar las tasas de homicidios cinco veces en los últimos cinco años.

A pesar de cumplir una condena de 34 años desde 2011, el capo seguía siendo una figura poderosa incluso tras las rejas.

Otro líder peligroso de banda, Fabricio Colón, escapó de la prisión de Riobamba durante disturbios el lunes por la noche, confirmó el servicio penitenciario. La fiscalía de Ecuador ha vinculado a Colón, líder de la banda Los Lobos, con el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio y con amenazas de muerte contra la fiscal general, Diana Salazar.

Noboa ha afirmado que no negociará con "terroristas" y su gobierno atribuye la reciente violencia en las cárceles a su plan de construir una nueva prisión de alta seguridad y trasladar allí a los líderes de pandillas encarcelados.

El presidente también planea llevar a cabo un referéndum para proponer medidas reforzadas de lucha contra el crimen, como incautar bienes de presuntos criminales y aumentar las penas de prisión.