En tribunal argentino, venezolanos testifican sobre crímenes de lesa humanidad bajo el régimen de Maduro

Familiares de manifestantes asesinados en las protestas de Venezuela de 2014 testificaron esta semana contra los crímenes de lesa humanidad bajo el régimen de Nicolás Maduro en un tribunal federal en Argentina.

Por primera vez para Venezuela bajo el gobierno de Maduro, un tribunal en Buenos Aires concluyó dos días de testimonios de víctimas de oficiales chavistas, los que supuestamente asesinaron a sus familiares, como parte de una investigación sobre posibles abusos de derechos humanos un año después de que Maduro asumiera el poder.

A principios de año, fiscales argentinos revivieron una denuncia penal presentada en 2023 por la Fundación Clooney para la Justicia en nombre de sobrevivientes y familiares de las víctimas para solicitar que Argentina investigue el posible “plan sistemático de represión” orquestado por las fuerzas que responden al régimen de Maduro. La declaración brindada por tres víctimas supone el mayor avance hasta ahora en la causa.

Según la denuncia, el ataque organizado contra la población civil entre febrero y mayo de 2014 “respondió a una política de Estado” y el asesinato de más de 20 manifestantes a manos de las fuerzas de seguridad chavistas se enmarcó dentro de un plan sistemático de represión.

Los fiscales declararon que los crímenes supuestamente cometidos por altos miembros de la Guardia Nacional venezolana eran de "extrema gravedad" y requerían una investigación inmediata.

Varios familiares volaron desde Venezuela para participar en la primera audiencia preliminar, que comenzó el jueves en Buenos Aires.

"Los que testifican son personas que han buscado justicia en Venezuela durante mucho tiempo, y han llegado al final de lo que pueden hacer", indicó Yasmine Chubin, directora de defensa legal en la Fundación Clooney, una organización sin fines de lucro que brinda apoyo legal gratuito a víctimas de abusos de derechos humanos.

Se alega que las fuerzas de seguridad usaron tácticas duras para reprimir las protestas masivas contra el dictador Nicolás Maduro en 2014, arrestando, torturando y asesinando a quienes sospechaban de disidencia.

La Corte Penal Internacional abrió en 2018 una investigación sobre crímenes de lesa humanidad en Venezuela, luego de una remisión sin precedentes de cinco países latinoamericanos y Canadá, pero años después la investigación sigue en su fase inicial.

En marzo, el tribunal con sede en La Haya rechazó la apelación de Venezuela y mantuvo su decisión de investigar los supuestos crímenes cometidos en el país. El régimen de Maduro niega las acusaciones, asegurando que está revisando algunas denuncias de abusos internamente.