Putin declara la ofensiva en Mariupol como un "éxito" y pide a sus tropas no asaltar último bastión ucraniano

El presidente ruso Vladimir Putin consideró un "éxito" militar la toma de la ciudad de Mariupol (Ucrania), pero dio instrucciones a sus fuerzas para que no asalten el último reducto de la resistencia ucraniana.

Durante una reunión televisada en el Kremlin el jueves, Putin discutió el asunto con el ministro de Defensa Sergei Shoigu, quien le informó que la planta siderúrgica de Azovstal estaba "bloqueada de forma segura" mientras que el resto de la ciudad portuaria había sido "liberada".

Putin ordenó a Shoigu pedir que los militares rusos se abstengan de lanzar un último asalto terrestre para preservar las vidas de los soldados rusos y, en cambio, se centren en instalar un fuerte bloqueo.

Los líderes del gobierno ucraniano llevan semanas intentando sacar a los soldados y civiles que se encuentran en Mariupol, los cuales están atrapados sin muchos alimentos, agua o ayuda.

La situación en Mariupol es, en parte, lo que ha llevado al presidente ucraniano Volodimir Zelenski a pedir a sus aliados occidentales un mayor suministro de armas.

El jueves por la mañana, el presidente Joe Biden anunció que Estados Unidos respondería al llamado con el envío adicional de 800 millones de dólares en municiones, drones tácticos y obuses.

"No sabemos cuánto durará esta guerra, pero a medida que nos acercamos a la marca de los dos meses, esto es lo que sabemos: Putin ha fracasado en lograr sus mayores ambiciones en el campo de batalla", consideró el mandatario el jueves por la mañana.

Estados Unidos ha dado 3.400 millones de dólares en apoyo militar a Ucrania desde el comienzo de la guerra, así como 4.000 millones desde que Biden asumió el cargo. La próxima semana, el presidente hará una petición adicional al Congreso para "mantener el flujo de armas y municiones sin interrupción".