La ciudad ucraniana de Mariupol cae en manos de las fuerzas de Putin

La ciudad portuaria ucraniana de Mariupol cayó en manos de las fuerzas rusas el martes, después de que las autoridades locales ordenaran a los soldados que defendían la ciudad asediada que depusieran las armas tras una batalla de meses, la cual dejó a la ciudad en ruinas.

Según un informe de Reuters, 264 miembros del servicio ucraniano -incluidos 53 heridos- se rindieron ante las fuerzas invasoras del Kremlin en la acería de Azovstal y, al parecer, los oficiales militares ordenaron la evacuación de toda su guarnición.

"La guarnición de 'Mariupol' ha cumplido su misión de combate. El mando militar supremo ordenó a los comandantes de las unidades estacionadas en Azovstal que salvaran las vidas del personal", señaló en un comunicado el Estado Mayor de las Fuerzas Armadas de Ucrania.

Más tarde, en un discurso televisado, el presidente ucraniano Volodímir Zelenskii explicó que "Ucrania necesita a los héroes ucranianos vivos".

Aunque Moscú y Kiev discutieron en los últimos días un acuerdo según el cual las fuerzas ucranianas abandonarían la planta siderúrgica, todavía no se han hecho públicos muchos detalles, como el número de combatientes que permanecen en el interior y si se consideraba alguna forma de intercambio de prisioneros, apuntó Fox News.

La viceministra de Defensa ucraniana, Hanna Malyar, comentó a la prensa s el martes que el gobierno no revelaría cuántos combatientes permanecían en Azovstal hasta que todos fueran evacuados de forma segura.

El Kremlin, por su parte, indicó que el presidente Vladimir Putin había garantizado personalmente que los prisioneros serían tratados de acuerdo con el derecho internacional de guerra y dijo que al menos 256 ucranianos habían "depuesto las armas y se habían rendido", incluidos 51 heridos graves.

En última instancia, la rendición ucraniana podría marcar el fin de la batalla de Mariupol, donde Kiev cree que decenas de miles de personas han muerto debido a las bombas que los rusos han enviado ahí desde el 24 de febrero.

Aunque la ciudad ha quedado reducida a escombros, su captura es la victoria más importante de Rusia hasta el momento, ya que otorga a Moscú el control de la costa del Mar de Azov, así como un puente terrestre entre el este y sur de Ucrania.