Mujer de Texas declarada culpable de asesinar a mujer embarazada y sacar a su bebé del vientre

Una mujer de Texas fue declarada culpable este lunes de asesinato capital por matar a una mujer embarazada y extraer al bebé de su vientre en 2020. 

En octubre de 2020, Taylor Rene Parker, de 29 años, golpeó a Reagan Micelle Simmons-Hancock, de 21 años, en la cabeza múltiples veces con un martillo. Luego procedió a cortarla y apuñalarla más de 100 veces antes de sacarle el feto con un bisturí. 

La acusada supuestamente fingió su embarazo durante más de 10 meses. Había investigado cómo simular un embarazo y cómo dar a luz a bebés prematuros de 35 semanas, tiempo de gestación que tenía la víctima cuando fue asesinada.

Parker se disfrazó para parecer embarazada, falsificó ecografías e incluso publicó sobre su "embarazo" en las redes sociales. 

Los fiscales afirman que mintió sobre su embarazo para que su novio no la dejara. Al parecer, Parker le dijo a su pareja que le inducirían el parto el día que asesinó a Simmons-Hancock. 

"En las últimas dos semanas, las pruebas nunca han sido más claras", manifestó la fiscal adjunta Lauren Richards ante el jurado. "Es una mentirosa, una manipuladora, y ahora tendrá que rendir cuentas por ello".

"El dolor que debió sentir Reagan cuando Taylor empezó a cortarle el abdomen, de cadera a cadera... es indescriptible", agregó Richards. "Cuando Taylor tuvo al bebé en sus manos y Reagan aún estaba viva, la comenzó a apuñalar, ya que no podía dejarla con vida. No fue una muerte rápida. Ella siguió cortándola. Supongo que Reagan no murió lo suficientemente rápido como para que Taylor saliera de allí y siguiera con sus planes".

Parker fue arrestada por la policía estatal la mañana del asesinato. Los agentes encontraron a la acusada con un bebé en su regazo y "el cordón umbilical conectado al bebé parecía salir de los pantalones de la mujer como si hubiera dado a luz", según la declaración jurada.

El equipo de defensa solicitó que se desestimara el cargo de secuestro alegando que el bebé nunca estuvo vivo, una maniobra que habría rebajado el cargo de homicidio capital a asesinato si se hubiera aceptado. 

"Es por eso que en las declaraciones iniciales dedicamos tanto tiempo a las definiciones. No se puede secuestrar a una persona que no ha nacido viva", explicó el abogado Jeff Harrelson en su alegato final.

Por su parte, los fiscales afirman que los profesionales de la medicina testificaron que el bebé tenía latidos cuando nació. 

Tras deliberar durante cerca de una hora, un jurado del condado de Bowie declaró a Parker culpable. Los fiscales solicitan la pena de muerte para Parker. El juicio de sentencia está programado para el 12 de octubre.