Familiares y vecinos aseguran que la Policía tardó en entrar a escuela atacada en Texas

Las fuerzas del orden se enfrentan este jueves a críticas y cuestionamientos por su tardía respuesta al tiroteo del martes en una escuela primaria de Texas que dejó 19 niños y dos profesoras muertas.

Aunque el incidente aún se encuentra en investigación y la cronología del ataque tampoco ha sido aclarada, muchos se preguntan por qué los agentes de la ley tardaron en irrumpir en el edificio y poner fin a la masacre.

Entre el momento en que el tirador, Salvador Ramos, de 18 años, llegó a la escuela y fue abatido, transcurrieron entre 40 minutos y una hora, advirtió el miércoles el director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Steve McCraw.

Según algunos testigos, varios espectadores instaron a las autoridades a entrar en la escuela. "¡Entren ahí! Entren ahí!", gritó una mujer mientras los agentes supuestamente se limitaban a ver cómo se desarrollaba el incidente.

Javier Cazares, padre de un alumno de cuarto grado que murió en el ataque, aseguró que llegó a la escuela después de escuchar sobre el incidente y encontró a la policía esperando afuera del edificio. Molesto por su falta de acción, sugirió a varios transeúntes entrar por cuenta propia a la escuela.

"Vamos a entrar a toda prisa porque la policía no está haciendo nada como se supone que debe hacer. Se podría haber hecho más, pero no estaban preparados", añadió.

Juan Carranza, un vecino que vio la situación desde su casa, ubicada al otro lado de la calle de la escuela, consideró que los agentes deberían haber entrado antes en el colegio. "Había más de ellos. Y sólo había un (atacante)", cuestionó.

Cops stood outside the school while the killer rampaged inside.

Onlookers yelled at them to go in. They didn’t. One parent urged bystanders:

“Let’s just rush in because the cops aren’t doing anything like they are supposed to.” @AP story: https://t.co/l2CqPCzmAf

— Andy Specht (@AndySpecht) May 26, 2022

Según las autoridades, Ramos irrumpió en la escuela con un rifle semiautomático tipo AR-15 y una pistola. Cuando entró en el edificio, intercambió disparos con un agente de seguridad del distrito escolar y luego corrió hacia el interior del edificio. Una vez dentro, Ramos disparó contra dos agentes de policía que llegaban, los cuales resultaron heridos, según un portavoz del Departamento de Seguridad Pública de Texas.

Poco después, Ramos se atrincheró en un aula y tras cerrar la puerta empezó a disparar a los niños y profesores. "Esto da muestra sobre la absoluta maldad del tirador", comentó a CNN el teniente Christopher Olivarez, del Departamento de Seguridad Pública.

"Y entonces [el tiroteo] se detiene, y él se atrinchera. Ahí es donde hay una especie de pausa en la acción. Todo esto, según tengo entendido, duró alrededor de una hora, pero aquí es donde hay una especie de pausa de 30 minutos. Sienten que lo tienen atrincherado. El resto de los estudiantes de la escuela están saliendo ahora", agregó el congresista Tony Gonzales, en entrevista con CNN.

Un funcionario de las fuerzas del orden con conocimiento del incidente afirmó que los agentes tuvieron dificultades para forzar la puerta del aula y tuvieron que conseguir que un miembro del personal la abriera con una llave, apuntó Associated Press.

Las autoridades de Texas ahora investigan la respuesta de las fuerzas del orden al incidente.

Sin embargo, el jefe de la Patrulla Fronteriza, Raúl Ortiz, quien también estaba en el lugar de los hechos, explicó que su equipo táctico no dudó en actuar cuando llegó al lugar.

"Entraron el aula y se ocuparon de la situación lo más rápido posible. Lo que queríamos era asegurarnos de actuar con rapidez, de actuar pronto, y eso es exactamente lo que hicieron esos agentes", añadió Ortiz.