Rusia enviará fuerzas a Kazajistán tras la muerte de decenas de manifestantes en las protestas

Decenas de manifestantes murieron y otros miles resultaron heridos por la terrible represión de la policía en las protestas de Kazajistán que comenzaron el domingo en zonas provinciales por el aumento de los precios del gas, y que se extendieron a la mayor ciudad del país, Almaty.

Ante tal situación, Rusia y otros aliados de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC) anunciaron este jueves el envío de tropas para apoyar al Gobierno, como parte de una “misión de paz”.

Esta sería la primera vez que la alianza liderada por Rusia y que incluye a Bielorrusia, Armenia y otros países de Asia Central, adoptan una medida como esta desde su fundación en 1992.

El Ministerio de Exteriores ruso aseguró que las protestas “han sido inspirados desde el exterior a través de formaciones armadas que han sido entrenadas”, agregando que la prioridad ahora es tomar decisiones que “faciliten la operación antiterrorista” lanzada por el Gobierno kazajo.

“Ante la petición del presidente de la República de Kazajistán, Kassym-Jomart Tokayev, y en vista de la amenaza a su seguridad nacional y su soberanía, causada entre otras cosas por injerencias externas, el colectivo CSTO, en conformidad con el artículo 4, decidió enviar fuerzas de mantenimiento de la paz”, reveló el primer ministro armenio, Nikol Pashinián.

La crisis provocó que este miércoles Tokáyev aceptara la renuncia del bloque del Gabinete del primer ministro y asumiese el control del Consejo de Seguridad, que estaba al mando de Nursultán Nazarbáyev desde 2019 cuando dejó la presidencia después de tres décadas en el poder.

Poco después, cientos de manifestantes irrumpieron en el edificio de la alcaldía de Almaty, por lo que Tokáyev decretó el estado de emergencia en la capital hasta el 19 de enero como respuesta a las protestas.

Como consecuencia del caos, se suspendieron las actividades de todas las instituciones financieras del país; y los aeropuertos de Almaty, Aktobe, Aktau y de la capital, Nursultán, no están operativos este jueves tras la cancelación de los vuelos el día anterior.

El conflicto provocó que el precio del uranio, del que Kazajistán es uno de los principales productores mundiales, subiera drásticamente, mientras que las cotizaciones de las empresas nacionales disminuyeron en la bolsa de Londres.

Kanat Taimerdenov, jefe de la policía local, informó este miércoles que el Ejército y unidades de la Guardia Nacional se unieron a las operaciones de seguridad ante lo que describió como ataques de "extremistas radicales" en distintos puntos de la ciudad.

Las autoridades señalaron que los agresores golpearon a unos 500 civiles y saquearon decenas de negocios. Decenas de personas con garrotes y escudos atravesaron las barricadas policiales de metal y entraron a la oficina del alcalde, en imágenes difundidas por la televisión local.

Más de 200 personas han sido detenidas en las manifestaciones por cargos de "perturbación del orden público". En los enfrentamientos, al menos 95 policías resultaron heridos, informó el ministerio del Interior.