¿Quién es el hombre más rico de la historia?

A lo largo de la historia, ha habido personas cuya riqueza ha sido tan inmensa que su impacto ha resonado en la economía global, la política y la cultura de su tiempo. Cuando se piensa en las personas más ricas de la historia, nombres como John D. Rockefeller, Jeff Bezos y Elon Musk vienen rápidamente a la mente. Sin embargo, la persona considerada como la más rica de todos los tiempos vivió en un periodo mucho más lejano y en un lugar inesperado: Mansa Musa, el emperador del Imperio de Malí en el siglo XIV.

¿Quién fue Mansa Musa?

Mansa Musa, cuyo nombre completo era Musa I, fue el décimo Mansa (emperador) del Imperio de Malí, que dominó gran parte de África Occidental durante su reinado desde 1312 hasta 1337. Este imperio era uno de los más grandes y ricos de su tiempo, conocido por sus vastas reservas de oro y su control sobre importantes rutas comerciales que cruzaban el Sahara.

Mansa Musa heredó un reino ya próspero, pero bajo su liderazgo, el Imperio de Malí alcanzó nuevas alturas de riqueza y poder. Su fama trascendió las fronteras de África, y su nombre se extendió por el mundo islámico y más allá.

Mansa Musa, cuyo nombre completo era Musa I, fue el décimo Mansa (emperador) del Imperio de Malí | Shutterstock / imagen de referencia

La riqueza de Mansa Musa provenía principalmente del control sobre las minas de oro de Malí, las cuales producían una gran cantidad del oro que circulaba en la economía global en ese momento. 

Además, el imperio tenía un próspero comercio de sal, otro recurso de gran valor en la época. Este control sobre recursos tan estratégicos permitió a Mansa Musa acumular una fortuna que muchos consideran incomparable con la de cualquier otra persona en la historia.

El impacto económico de Mansa Musa fue profundo y duradero. La repentina inyección de oro en las economías de Egipto, Arabia y el Mediterráneo oriental provocó una importante devaluación de la moneda en estas regiones. Es una de las primeras veces en la historia que un solo individuo puede influir en el valor de una moneda a tan gran escala.

Después de darse cuenta del impacto negativo que su generosidad había causado, Mansa Musa intentó corregir la situación tomando préstamos de oro de los prestamistas de El Cairo, aunque a tasas de interés muy altas, con el objetivo de sacar oro de la circulación y estabilizar la economía. 

¿Cuál sería su riqueza en la actualidad?

Si bien Mansa Musa es a menudo considerado como la persona más rica de la historia, otras figuras también han acumulado riquezas inmensas. John D. Rockefeller, por ejemplo, fue el primer multimillonario de Estados Unidos, con una fortuna ajustada por la inflación que se estima entre 300 y 400 mil millones de dólares en la actualidad. Sin embargo, a pesar de su vasta riqueza, Rockefeller no tuvo un impacto tan directo en la economía global como lo hizo Mansa Musa.

Otro ejemplo es el de los emperadores romanos como César Augusto, quien, según algunas estimaciones, controlaba una quinta parte de la riqueza del imperio más poderoso del mundo en su tiempo. No obstante, la riqueza de Augusto, aunque inmensa, estaba en gran parte ligada a la infraestructura del imperio, y su influencia no fue tan evidente en el comercio global.

En tiempos más recientes, personas como Jeff Bezos y Elon Musk han alcanzado niveles de riqueza sin precedentes en el mundo moderno, con fortunas valoradas en cientos de miles de millones de dólares. Sin embargo, sus riquezas están distribuidas en acciones, inversiones y propiedades, lo que contrasta con la riqueza en oro físico que poseía Mansa Musa.

Medir la riqueza de Mansa Musa en términos modernos es un desafío debido a las diferencias en la estructura económica y los sistemas monetarios de su tiempo en comparación con los actuales. 

Sin embargo, algunos historiadores han intentado hacer estimaciones ajustadas por la inflación. Según estas estimaciones, la fortuna de Mansa Musa podría valer hoy alrededor de 400 mil millones de dólares o más, superando con creces la de cualquier multimillonario contemporáneo.

Pero más allá de los números, lo que realmente destaca es la capacidad de Mansa Musa para influir en el comercio, la política y la cultura a una escala global. Su riqueza no solo se medía en oro, sino en su capacidad para moldear el mundo que lo rodeaba, desde la economía del Mediterráneo hasta el auge intelectual de África Occidental.