Puerto Rico se queda sin electricidad tras incendio de una central eléctrica

Toda la isla de Puerto Rico quedó a oscuras este miércoles después de que la mayor central eléctrica del territorio se incendiara, provocando interrupciones en la vida cotidiana.

La empresa privada encargada de la distribución de energía en la isla, Luma, afirmó que el apagón había afectado a los 3,2 millones de habitantes de la isla, pero solo 1,5 millones se quedaron a oscuras, según el sitio web de la compañía eléctrica estatal.

"Pido a todos que mantengan la calma", indicó el gobernador Pedro Pierluisi, tratando de responder a la preocupación de los ciudadanos con familiares que dependen de la electricidad para mantener a sus seres queridos con vida en los hospitales. Añadió que, se daría prioridad al restablecimiento de la electricidad en los hospitales y otras instituciones. 

El secretario de salud de la isla expresó que todos los hospitales y centros de salud estaban funcionando con generadores.  

El miércoles, alrededor de las 8:45 p.m., una falla no especificada causó un incendio en la planta eléctrica Costa Sur, en las afueras de Guayanilla, informó el vicepresidente de Luma, Kevin Acevedo, en una conferencia de prensa. 

En un comunicado, Luma dijo que la energía podría no restablecerse hasta este jueves y que daría más información cuando tuviera más detalles sobre la situación. 

"La red eléctrica ha sufrido un apagón masivo en toda la isla, posiblemente causado por un fallo en el interruptor de circuito de la planta de generación de Costa Sur. No tenemos clara la causa exacta en este momento", aseguró la compañía.

"El sistema se está restableciendo poco a poco", añadió Acevedo. "La gente de Puerto Rico tiene que entender que es un sistema con muchos años. Recuperar el sistema de la isla es un proceso delicado y complicado”.

Puerto Rico ha sufrido apagones periódicos en los últimos años debido a problemas con su red eléctrica. Luma se hizo cargo de la distribución y transmisión de electricidad de la isla en junio, prometiendo reducir las interrupciones de energía en un 30% y la duración de los apagones en un 40%.