Crimen y Corrupción
Dos pandilleros de EEUU condenados a entre 25 años y cadena perpetua por asesinato de un joven dominicano
El asesinato de Lesandro "Junior" Guzmán Feliz, un joven de 15 años, causó consternación adicional porque no era el objetivo de los pandilleros, sino que lo confundieron, según las denuncias
Septiembre 16, 2022 6:02pm
Updated: Septiembre 16, 2022 6:02pm
Un tribunal de Nueva York condenó este viernes a dos presuntos líderes de pandillas declarados culpables del asesinato del adolescente de origen dominicano Lesandro "Junior" Guzmán Feliz, un joven de 15 años que fue ejecutado con un machete frente a una bodega en 2018, a una pena de entre 25 años y cadena perpetua.
Diego Suero y Frederick Then, de 33 y 24 años respectivamente, habían sido los líderes de "Los Sures", una sección de la banda de Los Trinitarios. Un jurado los declaró culpables el 29 de julio tras un juicio de cuatro semanas por su participación en el asesinato.
Los condenados forman parte de más de una decena de arrestados pertenecientes a Los Trinitarios.
Cinco pandilleros ya fueron condenados en octubre de 2019, algunos a cadena perpetua, por el apuñalamiento y asesinato a machetazos de Junior, un caso que causó consternación adicional porque no era el objetivo de los pandilleros, sino que lo confundieron, según las denuncias.
De acuerdo con la acusación, la noche del 20 de junio de 2018, Suero, el líder de la banda, y Then, el segundo al mando, convocaron a los miembros a la casa de Suero, y allí éste les ordenó que cometieran actos de violencia contra otro grupo de trinitarios llamado "Sunset."
En el juicio se supo que los miembros de la banda se encontraron con Junior y lo persiguieron hasta que entró en una bodega de su barrio en el Bronx, donde intentó esconderse.
Sin embargo, lo golpearon y lo arrastraron fuera de la bodega hasta la acera, donde los cinco condenados lo apuñalaron con cuchillos y un machete, recordó la Fiscalía.
A poca distancia, Then presuntamente observó el ataque y luego llamó a Suero para informarle de que los miembros habían cumplido sus órdenes.
Los miembros de la banda volvieron a la casa de Suero para esconder las armas y prestar asistencia a un acusado que se cortó la mano durante el incidente, añadió la nota.