Crimen y Corrupción
Acusado de tiroteo en Búfalo no fue considerado una amenaza tras evaluación de salud mental
El supremacista blanco de 18 años que mató a 10 personas estaba en el radar de las autoridades estatales un año antes del ataque del domingo
Mayo 20, 2022 9:13am
Updated: Mayo 20, 2022 12:12pm
El supremacista blanco de 18 años que mató a 10 personas, en su mayoría negras, en una tienda de comestibles en Búfalo el domingo estaba en el radar de las autoridades estatales un año antes del tiroteo, aunque no fue considerado una amenaza, por lo que no se activaron las leyes de "bandera roja" del estado.
Payton Grendon realizó una similar relacionada en junio de 2021 con la escuela secundaria Susquehanna en Conklin, su ciudad natal rural. Entonces tenía 17 años y comentó durante una clase en línea que su objetivo tras la graduación era cometer un asesinato-suicidio, según la policía estatal.
Tras el dicho, los funcionarios de la escuela lo remitieron ante las autoridades competentes.
"La escuela hizo lo que debía hacer y llamó a la policía estatal. Y la policía estatal hizo lo que debía hacer al remitirlo a una evaluación de salud mental", señaló el fiscal del condado de Broome, Michael Korchak, cuyo distrito incluye a Conklin, en una entrevista el martes con USA TODAY.
Gendron finalmente mencionó a sus profesores, así como a los agentes que lo llevaron al Hospital General UHS Binghamton, que su amenaza era una broma, según The Wall Street Journal.
Es probable que dijera lo mismo al personal de salud mental, lo que llevó a determinar que el joven no era una amenaza para los demás.
Las familias de las víctimas han preguntado por qué no se hizo más, incluida la falta de una orden de protección de riesgo extremo -también conocida como orden de "bandera roja"-, la cual permite a la policía prohibir temporalmente la compra o posesión de armas de fuego a quienes suponen un peligro para sí mismos u otros.
El fiscal del distrito explicó que Gendron no fue remitido para una orden de este tipo porque no se archivaron los expedientes penales y tampoco tenía antecedentes de enfermedad mental.
"Ni siquiera mencionó un arma. No hizo ninguna amenaza directa contra los estudiantes de la escuela o los profesores, ni nada parecido", indicó Korchak, quien reiteró que las autoridades hicieron todo lo que pudieron en 2021 ante las circunstancias que se presentaron.
Gendron también advirtió en contra de exigir a las personas con enfermedades mentales que se registren en el gobierno, ya que ello podría plantear problemas sobre la privacidad y, de ser más estrictos, podría provocar que algunas personas rechacen el tratamiento de salud mental por miedo a perder su derecho al acceso a armas de fuego.