Crimen y Corrupción
Ayotzinapa: 6 de 43 estudiantes mexicanos desaparecidos fueron entregados a soldados y ejecutados
La revelación surge en la Comisión de la Verdad de México tras la detención del exfiscal general del país, a quien ahora se le imputa su implicación en el caso
Agosto 29, 2022 8:51am
Updated: Agosto 29, 2022 11:17am
Seis de los 43 estudiantes mexicanos de Ayotzinapa que desaparecieron en 2014 fueron secuestrados y retenidos en un almacén durante varios días, antes de ser entregados a un comandante de una instalación militar cercana que ordenó su ejecución, según un informe reciente de funcionarios que encabezan la Comisión de la Verdad del país.
Las revelaciones se produjeron poco después del arresto del exfiscal general del país, Jesús Murillo Karam, el 19 de agosto, quien fue acusado a principios de este mes, junto con algunos miembros de la policía y el ejército, de tortura, desaparición forzada y obstrucción a la justicia.
El caso ha ganado notoriedad en toda América Latina y en los Estados Unidos ya que la desaparición de los estudiantes provocó manifestaciones masivas en todo México. Los jóvenes se dirigían a una manifestación en la Ciudad de México cuando desaparecieron de repente en la ciudad de Iguala. Los fragmentos de huesos y otras evidencias recuperadas por las autoridades les han ayudado a rastrear gradualmente lo que pudo haberles sucedido y ahora surgen nuevos detalles.
Las revelaciones más recientes las hizo el subsecretario para Derechos Humanos de la Secretario de Gobernación (Segob), Alejandro Encinas, varios días después de la publicación de un informe elaborado por la Comisión de la Verdad del país, que coincidió con el arresto del exfiscal general.
El viernes Encinas reveló que las autoridades habían estado vigilando a los estudiantes desde el momento en que salieron de su campus en Ayotzinapa hasta su secuestro en Iguala más tarde esa noche.
Entre las impactantes revelaciones se dijo que uno de los estudiantes desaparecidos era un soldado mexicano que se había infiltrado en la escuela, y el aparato estatal de aplicación de la ley y el ejército no hicieron nada para rescatarlo.
“También hay información corroborada con llamadas telefónicas de emergencia al 089, donde presuntamente seis de los 43 estudiantes desaparecidos fueron retenidos durante varios días y con vida en lo que llaman el viejo almacén y de ahí fueron entregados al coronel”, dijo Encinas. “Los seis estudiantes habrían estado vivos hasta cuatro días después de los hechos y habrían sido asesinados y desaparecidos supuestamente por orden del coronel José Rodríguez Pérez”.
Desde el momento de la desaparición de los estudiantes, muchos sospecharon la participación o el conocimiento de los militares sobre el tema, lo que generó dudas y provocó manifestaciones en todo el país exigiendo justicia para los 43 desaparecidos. Muchos de los padres de los estudiantes desaparecidos querían allanar una instalación militar en Iguala, pero no se les dio acceso hasta 2019, cinco años después de que sus hijos desaparecieran. Esa búsqueda se realizó con la Comisión de la Verdad y los informes indican que Encinas también estaba allí.
Según el informe de la comisión, el gobierno registró una llamada de emergencia anónima el 30 de septiembre de 2014, solo cuatro días después de la desaparición de los estudiantes. La persona que llamó informó que los estudiantes estaban detenidos en un almacén en un área descrita como "Pueblo Viejo".
“Como se puede apreciar, existió una evidente colusión entre agentes del Estado mexicano con el grupo criminal Guerreros Unidos, que toleraron, permitieron y participaron en hechos de violencia y desaparición de los estudiantes, así como el intento del gobierno de ocultar la verdad sobre los hechos”, concluye el informe.
El informe también hace referencia a una figura sombría conocida como “el coronel”, que supuestamente participó en la operación.
“El 30 de septiembre 'el coronel' menciona que ellos se encargarán de limpiar todo y que ya se habían hecho cargo de los seis estudiantes que habían quedado con vida”, dice el informe.
Los informes indican que un testigo, el capitán José Martínez Crespo, quien habló con los investigadores federales, hizo referencia a un comandante de base del 27° Batallón de Infantería, llamado coronel José Rodríguez Pérez.
No está claro si las autoridades mexicanas arrestarán a Rodríguez Pérez. Recientemente emitieron órdenes de arresto contra 33 policías locales, 11 policías estatales, 20 miembros del servicio militar y 14 pandilleros.
Las autoridades mexicanas acusaron recientemente al exfiscal general Jesús Murillo Karam, quien estuvo a cargo de la investigación inicial, bajo la creencia de que desvió intencionalmente a los investigadores como parte de un encubrimiento. Murillo Karam enfrenta cargos por tortura, desaparición forzada y mala conducta oficial.
Los estudiantes supuestamente fueron bajados de los autobuses el 26 de septiembre de 2014 en Iguala por la policía local. Muchos creen que la policía los entregó a un cartel criminal cercano que sospechaba erróneamente que el grupo era miembro de un sindicato rival.