¡Tragedia! Hallan restos humanos dentro de un cocodrilo gigante

Las autoridades australianas informaron este martes que hallaron restos humanos dentro de un cocodrilo que atacó el sábado pasado a un hombre mientras estaba paseando en el río Annan, en el noroeste de Australia. Así lo reportaron los medios internacionales, que habían dado seguimiento al ataque del animal a una familia que estaba de vacaciones. 

A raíz de este hallazgo forense, las autoridades suspendieron el operativo de búsqueda y rescate emprendido poco después de reportarse que un turista había desaparecido tras caerse desde un puente a las aguas del río, poblado por cocodrilos, según un comunicado publicado por la Policía del estado de Queensland.

"Se está llevando a cabo un proceso formal de identificación, pero se cree que los restos son los de un hombre de 40 años desaparecido en Nueva Gales del Sur (al sur de Queensland)", precisó el comunicado.

Se cree que el fallecido sea el Dr. David Hogbin, amante de las actividades al aire libre, que había estado en el mismo lugar en el río Annan, cerca de Cooktown, menos de un año antes y estaba muy consciente de los peligros que representan los cocodrilos. El ataque ocurrió mientras la pareja paseaba con sus tres hijos pequeños por un sendero rodeado de agua, explican los medios locales. 

El hallazgo de los restos humanos se produjo después de que las autoridades de Queensland informaran la víspera que habían sacrificado a un cocodrilo de 4,9 metros capturado en un riachuelo cerca del lugar del incidente.

Este suceso se produce a menos de un mes de que las autoridades del Territorio Norte, colindante con Queensland, sacrificaran a un cocodrilo que mató a una niña de 12 años que nadaba en un riachuelo infestado de estos reptiles en la comunidad aborigen Palumpa (Nganmarriyanga), a unos 357 kilómetros al suroeste de la ciudad de Darwin.

Los cocodrilos de estuario (Crocodylus porosus), al igual que los tiburones, son dos temidos animales, pues, aunque sus ataques a humanos son esporádicos, pueden resultar mortales.

En Australia, estos animales, que pueden medir hasta seis metros, abundan en la región tropical del norte del país, después de que fueran declarados una especie protegida en 1971, cuando solo quedaban unos 3.000 ejemplares silvestres por la caza indiscriminada.

Estas medidas de protección permitieron que la población de cocodrilos de estuario se recuperara en el Territorio Norte hasta alcanzar unos 100 mil ejemplares en la presente década.