Estos países de la UE siguen importando petróleo ruso

Desde que el presidente ruso, Vladimir Putin, anunció por primera vez la invasión de Ucrania el 24 de febrero, los países occidentales han tomado medidas para sancionar a Moscú con sanciones cada vez más estrictas destinadas a paralizar la economía rusa.

El lunes, los funcionarios de la UE anunciaron que el bloque tomará medidas para prohibir completamente el petróleo ruso para fin de año como parte de un sexto paquete de sanciones y presionará para que aún más bancos rusos y bielorrusos sean cortados de SWIFT, el sistema de pagos internacionales, informó Bloomberg.

Sin embargo, mientras países como Australia, Gran Bretaña, Canadá y Estados Unidos han impuesto prohibiciones totales a las compras de petróleo ruso, los 27 países miembros de la UE no han podido llegar a un compromiso.

Alemania, la economía más grande de Europa, ha dicho que estará preparada para implementar un embargo total sobre las importaciones de petróleo ruso para fin de año, pero advirtió que un paro total podría resultar en última instancia en escasez, informó DW.

Hungría, por otro lado, expresó su firme oposición a la medida y dijo que se opondría a cualquier embargo de la UE sobre el petróleo de Moscú.

Aún así, muchas refinerías en Europa han dejado voluntariamente de comprar energía rusa, o han prometido hacerlo al vencimiento de sus contratos vigentes.

Para otros, sin embargo, la vida sigue igual. Eche un vistazo a la lista que aparece abajo (compilada por Reuters) para saber qué empresas europeas todavía tienen vínculos con las empresas petroleras estatales rusas.

Bulgaria: Neftochim Burgas

Neftochim Burgas, propiedad de Lukoil de Rusia, actualmente importa alrededor del 60% de su crudo de Rusia y continúa refinando el crudo ruso.

Alemania: LEUNA, MIRO, PCK Schwedt

Aunque LEUNA recibe cantidades mínimas de exportaciones energéticas rusas, tanto MIRO como PCK Schwedt son propiedad parcial de la empresa energética estatal rusa Rosneft y reciben petróleo crudo a través del oleoducto Druzhba de Rusia.

Grecia: Hellenic Petroleum

Hellenic Petroleum es la refinería de petróleo más grande de Grecia y todavía depende del crudo ruso para aproximadamente el 15% de su consumo.

Hungría: MOL

MOL de Hungría, que opera refinerías en Hungría, Eslovaquia y Croacia, continúa comprando crudo ruso que se entrega a través del oleoducto Druzhba. La compañía ha presionado contra nuevas sanciones y ha dicho que tomaría entre dos y cuatro años reemplazar las importaciones energéticas rusas, a un costo de entre 500 y 700 millones de dólares.

Italia: ISAB

ISAB, la refinería más grande de Italia, se ha visto obligada a importar casi todo su crudo de Rusia porque los bancos internacionales ya no le otorgan crédito.

Polonia: PKN Orlen

Aunque la refinería más grande de Polonia dejó de comprar crudo ruso en el mercado al contado, sigue comprando Urales en virtud de contratos existentes que expirarán a fines de este año.