Alemania y República Checa firman declaración de solidaridad mientras se detiene flujo de gas ruso

 Alemania y la República Checa firmaron este lunes una declaración conjunta de solidaridad, en la que se comprometen a superar la dependencia de los combustibles fósiles de Rusia y acelerar la transición hacia energías bajas en carbono.

Lo anterior debido a que la caída de las importaciones de gas ruso amenaza la seguridad del suministro en toda Europa, reportó Reuters.

Este 11 de julio el gasoducto Nord Stream 1, el más grande que transporta gas ruso a Alemania comenzó su mantenimiento anual, y se espera que los flujos se detengan durante 10 días.

Dicho gasoducto transporta 55 mil millones de metros cúbicos (bcm) al año de gas desde Rusia hasta Alemania por el Mar Báltico

Sin embargo gobiernos, mercados y empresas temen que el cierre pueda extenderse debido a la guerra en Ucrania.

Supuestamente las actividades se reanudarán el 21 de junio, pero el gobierno alemán reconoció que la situación es "tensa" y "muy seria".

 Susanne Ungrad, portavoz adjunta de Economía, aseguró que "a fecha de hoy la seguridad del suministro está garantizada" y agregó que por el momento no se plantea declarar el próximo nivel en el plan de emergencia del gas, que implicaría la intervención del Estado en el mercado para regular el flujo, reportó EFE.

A finales de junio el ministro de Economía y Clima, Robert Habeck, señaló que el nivel de alerta se declara cuando se produce una interrupción del suministro de gas o una demanda excepcionalmente alta que cause un empeoramiento considerable del suministro.

Ya este nivel fue declarado en Alemania el 23 de junio anterior.

La Agencia Federal de Redes indicó este lunes que "la situación es tensa y no se puede descartar un deterioro", aunque subraya que el suministro de gas en Alemania actualmente es estable.