Estampida humana en una iglesia deja 31 muertos en Nigeria

Al menos 31 personas murieron y otras siete resultaron heridas este sábado por una estampida humana que ocurrió en el sur de Nigeria durante una entrega de alimentos a los pobres organizado por una iglesia en la ciudad de Port Harcourt, en el estado de Rivers, informó la policía.

La iglesia, conocida como Kings Assembly, convocó un evento en el que prometió entregar regalos y comida a cientos de feligreses que acudieron durante la mañana y rompieron la puerta desesperadamente, lo que provocó la estampida.

"Desafortunadamente la multitud se volvió tumultuosa e incontrolable y todos los esfuerzos hechos por los organizadores para llamar a la calma fracasaron", explicó la policía en un comunicado, añadiendo que se ha abierto una investigación para encontrar la causa del incidente.

Esos eventos son comunes en Nigeria, la mayor economía de África y donde más de 80 millones de personas viven en pobreza, según estadísticas del gobierno nigeriano citado por Associated Press.

Los líderes de la iglesia que organizaron el evento no estuvieron disponibles para realizar comentarios. Testigos afirman que, al ver la multitud que se había congregado, miembros de la iglesia cerraron la puerta, lo que enfureció a los presentes.

Godwin Tepiktor, de la agencia nacional de emergencias, indicó que los rescatistas lograron retirar los cadáveres de las personas pisoteadas y llevarlos a la morgue. Más tarde, decenas de personas acudieron al lugar para ofrecer su ayuda a los trabajadores de emergencias.

Un testigo que se identificó como Daniel dijo que “había muchos niños” entre los muertos. Cinco de los menores eran hermanos, declaró a la AP, añadiendo que una mujer embarazada también perdió la vida.

En febrero de 2019, Nigeria sufrió un incidente similar cuando 14 personas murieron y otras ocho resultaron heridas también en Port Harcourt, durante una estampida tras un mitin de la campaña del presidente nigeriano Muhammadu Buhari, quien aspiraba entonces a la reelección.

En noviembre de 2013, al menos 28 personas fallecieron y 200 resultaron heridas a consecuencia de una estampida humana luego de una vigilia en un centro religioso de la ciudad de Ukeh, en el estado meridional de Anambra.