Tribunales de EEUU analizan si los maestros están obligados a decirles a los padres que su hijo puede ser trans

En la actualidad se están debatiendo varios casos judiciales para decidir si se debe exigir a los funcionarios escolares que informen a los padres si su hijo se identifica como LGBT.

Es probable que los casos estatales y federales generen más batallas legales y legislativas sobre cuestiones espinosas en torno a la identidad de género de los estudiantes, el alcance de los derechos de los padres y los límites de la autoridad escolar en cuestión.

Según los informes, la primera demanda fue en 2020 contra un distrito escolar en Madison, Wisc. Se han presentado otros casos en distritos escolares de todo el país, incluido el condado de Montgomery, Maryland; Condado de León, Florida; y el condado de Ludlow, Massachusetts.

Rick Claybrook, abogado de los padres en la demanda contra el distrito escolar del condado de Montgomery, dijo a Education Week: "El tema central en el caso son los derechos de los padres sobre sus hijos y saber lo que está pasando en la escuela con sus hijos, y por con esta ley, eso les está siendo negado".

Los padres han argumentado en múltiples casos que cuando las escuelas apoyan el estilo de vida LGBT de los niños sin informar a los padres, se violan las constituciones estatales o la Enmienda 14 de la Constitución de los Estados Unidos.

"Los niños tienen a sus padres para protegerlos porque no pueden hacerlo hasta que alcanzan la madurez, y creo que a menudo no van a entender si los padres los apoyan o no", dijo Claybrook.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EEUU descubrieron en 2017 que el 1,8 % de los estudiantes de secundaria se identifican como transgénero.

Los activistas LGBT ven las demandas como parte de un esfuerzo político más amplio que se desarrolla en las legislaturas estatales de todo el país, citando leyes promulgadas recientemente que prohíben que los estudiantes transgénero jueguen en equipos que no se alinean con su sexo biológico y restringen lo que los instructores pueden enseñar sobre identidad de género.

"No puedo evitar reconocer que aunque se han propuesto los 'derechos de los padres' como base y marco para muchas de estas cosas, una preocupación mayor no son necesariamente los derechos de los padres, sino el miedo de los padres a las personas LGBTQ y tratar de controlar el acceso a esas cosas por parte de los jóvenes", dijo Kell Olson, abogado de Lambda Legal que se especializa en casos LGBTQ, a Education Week.

Cada uno de los casos enfrenta a las escuelas contra los padres.

En Ludlow, por ejemplo, los padres presentaron una demanda después de que dijeron que los funcionarios escolares permitieron que su hija cambiara de nombre y pronombre desafiando un correo electrónico de los padres pidiéndoles que dejaran de hablar con su hija sobre temas relacionados con su salud. Los padres tenían a su hija en consejería para ayudarla a lidiar con la atracción hacia personas del mismo sexo en ese momento.

En una demanda de California, los padres afirmaron que los maestros organizaron un club LGBTQ secreto para instar a sus hijos a identificarse como transgénero.

Los funcionarios escolares "caminan por esa delicada línea que equilibra los intereses de privacidad del estudiante frente a sus padres y sus deberes legales", escribió la Asociación Nacional de Juntas Escolares sobre cuestiones transgénero en 2016.

Las demandas intentan dejar más claro el papel de las escuelas y los padres. Los padres argumentan que deben dar su consentimiento a la identidad sexual y los pronombres de sus hijos.

Las escuelas no pueden legalmente dar vacunas a los estudiantes menores o incluso ibuprofeno sin el consentimiento de los padres, y los padres deben firmar formularios para que sus hijos vayan a excursiones y practiquen deportes, dijo Luke Berg del Instituto de Derecho y Libertad de Wisconsin a Education Week.

“La corte debería requerir el consentimiento de los padres antes de facilitar una transición en la escuela, porque es una transición muy importante y puede causar daño”, dijo.

Ninguna de las demandas ha llegado a la etapa de juicio todavía.

La administración Biden está trabajando para consagrar la protección del estado de identidad de género en el Título IX, que protege contra la discriminación basada en el sexo.

Sin embargo, en un caso de 2013, un tribunal federal de apelaciones dictaminó que la Enmienda 14 no creaba un derecho de privacidad que impidiera a los funcionarios escolares "discutir con los padres los asuntos privados del estudiante, incluidos los asuntos relacionados con la actividad sexual del estudiante".

A Olson le gustaría ver a los padres apoyar las "políticas razonables" de los distritos escolares en lugar de reaccionar recurriendo a los tribunales para defender los derechos de los padres.

"Conocemos miles de distritos en todo el país que abordan con éxito estos problemas y brindan entornos de apoyo y afirmación para los estudiantes en coordinación con los padres", dijo a Education Week. "El enfoque debe estar en apoyar políticas razonables, en lugar de una reacción instintiva que dice que debemos comenzar a demandar a las escuelas".

Cada caso tiene implicaciones diferentes para el equilibrio entre la autoridad escolar y los derechos de los padres. Si Claybrook gana el caso de los padres en el condado de Montgomery, por ejemplo, significaría que la escuela debe informar a los padres si un niño dice que quiere hacer una transición social.

“Básicamente estás diciendo que los funcionarios escolares, basándose en quizás media hora con un estudiante, decidirán si tienen padres abusivos o negligentes” según la política actual del condado, dijo Claybrook. "Existen disposiciones en Maryland y en todos los demás estados para tratar con padres abusivos y negligentes, y eso requiere que se siga el debido proceso".

La demanda de Madison es la que más ha avanzado y en mayo la Corte Suprema de Wisconsin escuchará el caso.

Hasta el momento, un juez ha emitido una orden judicial preliminar que impide que la escuela use sus reglas "de cualquier manera que permita o requiera que el personal del distrito oculte información o responda falsamente a cualquier pregunta que los padres hagan sobre su hijo en la escuela".

Si bien la encuesta de 2017 mostró que menos del 2 % de los estudiantes de secundaria se identifican como transgénero, las cifras parecen haber aumentado desde entonces.

Una encuesta de febrero de Gallup encontró que el 2,1% de los estadounidenses nacidos entre 1997 y 2003 se identifican como transgénero, un porcentaje más alto que nunca.

"Creo que una de las teorías es que esto, en parte, es al menos socialmente condicionado, que los estudiantes que luchan con esto se ven afectados por los mensajes que escuchan en las escuelas, los mensajes que escuchan de sus compañeros, y hay niños que luchan con esto, que no tendrían que luchar si no fuera por los mensajes que escuchan todos los días en las escuelas desde las redes sociales", observó Berg del Instituto de Derecho y Libertad de Wisconsin.