Tribunal de Nueva York dictamina que Happy, la elefanta no es una persona jurídica

El Tribunal de Apelaciones del estado de Nueva York dictaminó el martes que la elefanta Happy no es una persona, con lo cual puso fin a la disputa legal de años para dar derechos humanos al animal.

Según el equipo legal de la elefanta, su cliente con trompa está retenida por el zoológico del Bronx "ilegalmente", y sus derechos como persona establecen que debe ser liberada inmediatamente.

"La elefanta está encarcelada en contra de su voluntad. Durante más de 40 años se la ha mantenido como prisionera", aseguró Steven Wise, abogado de Happy y miembro el Proyecto de Derechos de los No Humanos (NRP), en entrevista con el Wall Street Journal.

Sin embargo, el tribunal dictaminó en una decisión de 5 a 2 que Happy no es una persona en sentido jurídico y, por tanto, no tiene derecho a los derechos humanos fundamentales. La decisión implica que Happy seguirá viviendo en el zoológico del Bronx, el cual ha sido su hogar durante los últimos 45 años.

Happy, una hembra de elefante asiático, nació en estado salvaje en 1971 en Tailandia. Fue llevada a Estados Unidos y vendida por 800 dólares al Lion Country Safari, junto con otras seis crías de elefante, todas ellas con el nombre de los enanos de Blancanieves y los siete enanos, según el sitio web del NRP.

En 1977, los seis elefantes fueron reubicados en circos y zoológicos de todo el país. Happy y Grumpy fueron enviados al zoológico del Bronx.

En 2005, Happy se convirtió en el primer elefante en pasar la prueba de auto reconocimiento en el espejo, la cual supuestamente demuestra que un animal tiene conciencia de sí mismo.

Sus abogados afirman que al realizar esta acción de autoconciencia, el elefante demuestra que es un ser inteligente al cual se le deben reconocer derechos. Si Happy tuviera personalidad jurídica, el equipo de NRP habría podido trasladar al elefante del zoológico a un amplio santuario.

Aunque el tribunal admitió que Happy era "impresionante", los argumentos de NRP no fueron suficiente para concederle la condición de persona.

"Dado que el recurso de habeas corpus está destinado a proteger el derecho a la libertad de los seres humanos a estar libres de un confinamiento ilegal, éste no es aplicable a Happy, un animal no humano que no es una 'persona' sometida a una detención ilegal", afirma la decisión.

"Por lo tanto, aunque nadie discute que los elefantes son seres inteligentes que merecen el cuidado y la compasión adecuados, los tribunales inferiores concedieron correctamente la moción de desestimación de la petición de habeas corpus y, por lo tanto, la confirmamos", sentenció el Tribunal de Apelaciones.

El juicio de Happy implicó por primera vez a un tribunal estadounidense en la presentación de argumentos orales sobre la posible personalidad jurídica de un elefante.